Guarda tu mercancía en una minibodega portátil

Si eres un emprendedor y no tienes dónde guardar tu mercancía, puedes rentar una minibodega portátil para almacenar todo lo que necesites. El primer paso es buscar una compañía que ofrezca minibodegas portátiles en renta y escoger la unidad más adecuada a tus necesidades. ¿Sabes cómo hacerlo? ¡Aquí te lo decimos!

Las ventajas de las minibodegas

Una de las primeras cosas que debes saber antes de rentar una minibodega portátil es qué puedes y qué no puedes almacenar dentro de ella.

Lo que sí:

Muebles domésticos Ropa Objetos de oficina Piezas de arte o de colección Artículos deportivos y/o acuáticos Equipos en desuso Lotes de mercancía por cierre de negocio Donaciones Computadoras Archivo muerto Juguetes Autos Motocicletas n

Lo que no:

Alimentos Mascotas Perecederos nCombustibles

Una minibodega portátil puede servirte para ampliar el espacio de tu casa, por ejemplo si quieres poner una habitación más o si necesitas dónde estacionar tu carro. Pero también te es útil si quieres tener un lugar para vender tu mercancía, en caso de que no tengas un local de venta o un espacio adecuado para ello.

Tu mercancía en una minibodega portátil

Cuando ya has decidido guardar los artículos de tu negocio en una minibodega portátil de renta, lo primero que tienes que hacer es decidir cómo vas a almacenar todo. Recuerda que antes de acomodar los objetos tienes que pensar en un espacio a manera de pasillo dentro de la minibodega portátil.

Si vendes ropa, lo que tienes que hacer es:

Utiliza cajones de muebles para el almacenamiento de prendas delicadas. Envuelve dichas prendas en plástico burbuja o papel de embalaje para que no se maltraten.

Si tu negocio se trata de juguetes:

Cuando empaques juguetes u objetos más pequeños, recuerda llenar completamente las cajas porque si queda algún espacio vacío tendrás que llenarlo con papel periódico para que no se maltrate tu mercancía. Pon los patines o patinetas en cajas sobre el suelo.

Si vendes equipo de jardinería usado:

Tienes que fijarte en que los aparatos estén sin combustible y sin líquidos para evitar daños por corrosión. Recoge muy bien los cables para que no estorben al caminar y usa botes de basura para empaquetar palas y rastrillos.

Si vendes electrónica:

Procura que los aparatos tengan suficiente espacio entre unos y otros para evitar daños por contacto. Recoge los cables de cada aparato para que no estorben el paso. Evita los líquidos para que no haya daños en tu mercancía.

Si vendes muebles:

Desarma los que tengan esa característica y envuelve sus patas, así prevendrás los rayones. Pon una manta en el piso de la minibodega antes de colocar los muebles. Coloca las mesas boca abajo y apila las sillas de asiento en asiento con un paño o papel entre cada silla para proteger su superficie. Evita apilar o inclinar los muebles contra las paredes. Para ahorrar espacio desmonta los muebles grandes. Coloca todos los tornillos, pernos, etc., en un envase o en una bolsa.

Si vendes libros:

Evita llenar demasiado las cajas o serán muy pesadas y mantenlas libres de humedad mediante la colocación de láminas de plástico en la parte superior.

Si vendes cristalería o artículos frágiles:

Envuelve los objetos de forma individual antes de colocarlos en una caja y llena con papel los espacios vacíos dentro de ella.

Otros consejos útiles son:

Pon los objetos que más uses al frente de la minibodega y ten en cuenta que si rotulas las cajas para identificarlas, te será más fácil encontrar tus productos. Evita usar cajas desgastadas, pues colapsan con facilidad. Empaca las cosas pesadas en cajas pequeñas y ligeras. Nunca empaquetes cosas tapizadas en bolsas o recipientes cerrados, especialmente durante primavera y verano o se formará moho. Las camas y sofás de plástico deben ser almacenadas en posición vertical. Los artículos tapizados y camas deben mantenerse donde no les caiga tierra.