El tarot nos previene: cuidado cómo actuamos

Hay un proverbio que dice que quienes viven con la espada mueren con la espada, y el diez de espadas es el arcano del tarot que nos enseña las consecuencias en la vida real de este dicho. Es la carta resume muy claramente el poder destructivo y negativo de las espadas. Con sólo una espada podría haberse acabado con la vida de ese hombre de la figura, pero fueron utilizadas diez espadas, de manera exagerada y brutal. No ha sido asesinado, sino aniquilado. Es preciso volver al as de espadas, el primer arcano de la familia de las espadas. Esta nos explicaba sobre las consecuencias de cuando se utiliza la fuerza excesiva para los planes del mal, y el diez de espadas nos cual es el resultado forzoso de un abuso de poder. Inexorablemente, aquel que se niegue a oír la sabiduría de las espadas terminará siendo aniquilado por ellas.

Cuando sale revelada esta baraja en la tirada del tarot, normalmente significa un fallo repentino e inesperado, un desastre, una fuerza más allá del poder de la persona que lo humilla y lo aniquila sin aviso ni piedad. No se puede evitar pensar en la ley del karma, tan famoso en la filosofía oriental. Esta ley dice que la persona cosechará lo que sembró, y si ha actuado con maldad, es lógico que termine como lo muestra la figura.

Pero, como todos los arcanos, el 10 de espadas también tiene un lado positivo, y es el de anunciar que estamos ante la prueba final, el paso último en una larga sucesión de eventos. Dicen que la noche es más oscura en el momento justo antes del amanecer, y esta carta nos muestra justamente eso. Peor no puede ponerse, de modo que sólo nos resta levantarnos del piso y comenzar nuevamente.

Si observamos con detenimiento el fondo de la ilustración, veremos al sol levantándose entre nubes negras. El presente es extremadamente negativo, pero el futuro es promisorio. Cada nuevo comienzo debe venir de un final, el cual puede ser una derrota, pero eso no impedirá que se siembren las semillas de la futura victoria. La iluminación proviene del uso de las facultades mentales y espirituales para el bien, y esta es la lección que este arcano del tarot nos deja. Es necesario aprender de los errores y las fechorías, para no caer nuevamente bajo el filo de la espada.