La capital de Yucatán fue fundada en 1542 sobre los vestigios de un asentamiento maya. Hoy día, esta bella ciudad es uno de los principales destinos turísticos del país, y no es para menos: aquí puedes probar algunos de los platillos más deliciosos de la gastronomía mexicana, admirar inigualables maravillas naturales y acercarte a las culturas maya y mestiza.
Mérida es la meca de la arquitectura colonial. Durante los siglos XIX y XX aquí se construyeron elegantes edificios y casonas con una marcada influencia francesa. En el famoso Paseo de Montejo encontrarás recintos de gran trascendencia histórica, como el Palacio Cantón, de estilo renacentista italiano y que hoy alberga el Museo de Antropología e Historia, y el Monumento a la Patria, un homenaje a la historia de Yucatán labrado en piedra.
En el centro histórico de Mérida también te toparás con imponentes edificaciones, como la Catedral de San Ildefonso, la más antigua del continente americano, y la Casa de Montejo, que se conserva en excelente estado. ¿Tienes hambre? Dirígete a alguno de los restaurantes típicos del centro y deléitate con unos ricos panuchos, un queso relleno o unos tacos de cochinita pibil. No olvides acompañar tu comida maya con una refrescante agua de chaya.
En los alrededores de esta ciudad se asientan zonas arqueológicas –no dejes de visitar Chichen Itzá y Dzibilchaltún–, ciudades con una fuerte tradición prehispánica, como Izamal y Valladolid, y maravillas naturales, como los cenotes sagrados.
