Rostros y Caretas Experienciales en el Espacio-Tiempo Curvo. Vídeo-Arte Multidimensional

El trabajo creativo desarrollado en el Rivismo, se basa en dar protagonismo a las experiencias vividas por los materiales, elementos, dispositivos, etc. Elementos, que llevan incorporadas sus experiencias, su aspecto, su desgaste mecánico y físico, y la grabación de historias vividas paralelamente en compañía de personas, siendo testigos sin voz de lo que acontece en la línea de tiempo.

Las Pinceladas Experienciales se encargan de llevar todas estas vivencias materiales al soporte que se constituirá en escenario de la Obra. Experiencias que aunque perteneciendo a distintos tiempos pasados, son captadas en un instante dado para incorporarlas de una forma fácilmente reconocible en cada pincelada.

Utilizando la Teoría del Rivismo y aplicando sus Conceptos, es posible crear los Rostros Materiales o Experienciales.

Ahora, sólo queda aplicar algunos de dichos conceptos; “De una Parte al Todo”, para llegar a transformar cualquiera de estos elemento o parte de ellos, en un Rostro. Y  “Del Todo a una Parte”, para crear los Ojos, -u otras partes-, que también representen el mismo Todo.

Rostro con características que recuerdan al humano. Pero tanto, sus experiencias e historias  vividas, como sus sentimientos y empatía, se manifiestan en forma de energía sin masa. Una energía que no es visible pero que está presente allí en donde se encuentren estos elementos. Las Pinceladas Experienciales –que captan un instante de estos elementos-, se encargan de transportar esta energía al lienzo durante el proceso de creación de la obra.

El aspecto de estos rostros, induce a pensar en disfraces y máscaras venecianas. Objetos, que -en su momento-, jugaron un papel esencial en el mundo anónimo, en el que las divisiones de clases parecían desaparecer, donde por arte de magia todos se volvían iguales, donde todo, lúdica y no tan lúdicamente, estaba permitido. Sin embargo, en los Rostros de la Materia, las máscaras y los disfraces diluyen su origen, sus materiales se hacen transparentes, y tanto, que se confunden con la energía sin masa, -invisible-, que es la que portan estos rostros, dando lugar a un nuevo concepto del Rivismo; Máscara Experiencial.

Si paseamos por alguna de las Obras; Rostros de la Materia, El Grito del Huevo, Todos a Una, Rostros Experienciales,…entre otras, podemos identificar el rostro, e incluso, sumergirnos en estas sensaciones. Reconocer expresiones empáticas entre materiales, e incluso intra-empáticas, como sucede en la obra El Grito del Huevo, en donde, el propio rostro en estado de terror por la situación que vive, trasfiere empáticamente a sus ojos la misma expresión, hasta tal extremo de convertirlos en el rostro mismo. Una parte de él, -un ojo-, se pone en el lugar del otro, se clona. El Todo y una Parte suya,  transformada también en el mismo Todo coinciden en el mismo escenario, en la misma composición. Empatía entre partes del mismo elemento. Se trata de un nuevo concepto; Intra-empatía experiencial.

También es posible ampliar estos conceptos, trabajando los elementos experienciales referidos anteriormente, hasta conseguir una mezcla, con una apariencia semejante a la que se puede conseguir con material pictórico. Experiencias vividas -en diversos materiales o elementos- entremezcladas para ser utilizadas por el pincel experiencial, e incluso, una obra acabada del Rivismo puede ser el material a mezclar y transformar, para servir de base como pintura experiencial para crear las Caretas o Máscaras del Rivismo.

Incorporando la Teoría de la Relatividad General de Einstein, el material que se aplica para crear los Rostros y las Caretas, puede ser multi-temporal, al utilizar las Pinceladas N-Dimensionales. La cara creada, puede estar compuesta por distintas partes, cada una de las cuales pertenezca a épocas distintas, pero que las vemos y están presentes en el escenario en el mismo instante, gracias a la supuesta existencia de los Agujeros Negros y de Gusano.

Estos conceptos, que dependen de poder validar y hacer realidad la Teoría de Einstein, abren la puerta a otros conceptos a los que se puede aplicar la propiedad  multi-dimensional y multi-temporal, y que dan lugar, por ejemplo; a expresiones cambiantes en rostros sometidos a aplicaciones con estas propiedades, a epidermis cambiantes, a rubores vivos,…etc.

En el caso de utilizar como soporte un lienzo o similares, lo que se incorpora al mismo, son los estados experienciales de cada elemento o materia, captados en su respectivas épocas y vistos todos al unísono, en el instante en el que se ha realizado dicha incorporación.

Si las pinceladas experienciales, estuvieran incorporadas a un soporte vídeo, lo que realmente veríamos, sería una composición multicolor de vídeos, en los  que cada uno de los cuales, proyectaría imágenes experienciales de su época, y todo gracias a los Agujeros de Gusano.

El resultado final, sería un panel con muchos vídeos en su función de pinceles experienciales. Dando lugar así, a un escenario vivo, latente y cambiante, siempre en función de lo que está ocurriendo, –en vivo-, en otras épocas, y que el observador lo está viendo al mismo tiempo. Estos vídeos del Rivismo, N-Dimensionales/Temporales (Vídeos N-DT), marcarán la pauta del Arte-Multidimensional y de los Vídeos del futuro.

Volviendo a la Obra de Ramón Rivas: “Careta Experiencial”, construida sobre lienzo, representa una máscara o un disfraz, con pinceladas  experienciales entremezcladas, total o parcialmente, y que también utiliza –a diferencia de los Rostros Materiales - partes humanas como son; ojos, boca y labios. De esta forma, se comparten empatías humanas con las de los materiales experienciales.

Rostros y Caretas, que se convierten en el soporte visual para que los contenidos de las Pinceladas Experienciales,  transmitan  y diseminen las sensibilidades materiales al Espacio-Arte. Rostros y Máscaras/Caretas N-Dimensionales que se convertirán en soportes visuales del pasado, del presente y del futuro, en cuanto sea posible sacar el billete para viajar a través de los Agujeros Negros.