Qué hacer cuando se extravía la maleta en el aeropuerto

Una situación muy común cuando se viaja en avión es la pérdida del equipaje. Se calcula que aproximadamente 40 millones de valijas y bolsos se pierden en los aeropuertos. También es común que las valijas no estén exactamente "pérdidas" sino que hayan terminado en un aeropuerto distinto al del pasajero. Esta desafortunada situación sólo es generadora de pérdidas de tiempo y de mala sangre para quien se había dispuesto a pasar unas vacaciones soñadas.

Los seguros para viajeros son una forma de prevenir daños mayores cuando viajamos en avión, pues serán de inestimable ayuda en caso de que la documentación personal también se extravíe con la maleta. Pero también podemos tomar algunos recaudos para evitar que esto suceda. Lo primero y más importante es etiquetar el equipaje. Será conveniente colocar las unas etiquetas a todos y cada uno de los bultos con el nombre, la dirección y un teléfono móvil, sin olvidar el código de país. También es conveniente colocar esta misma etiqueta en el interior de la valija, dado que es sabido que los operarios de los aeropuertos no suelen tratar a las valijas con demasiada delicadeza, y la etiqueta exterior podría perderse.

Otra excelente idea para proteger aún más nuestro equipaje es usar precintos plásticos y candados para evitar que puedan ser abiertas por terceros, o que puedan abrirse de forma accidental. Un precinto alrededor de la valija asegurará de que en caso de golpe que puedan aflojar las cerraduras, la valija permanezca cerrada protegiendo su contenido.

Cuando se trata de transportar equipaje por avión, es mucho más conveniente llevar una valija grande que varios bultos pequeños. De esta forma resultará más sencillo controlar que el equipaje vuelva a caer en nuestras manos luego del viaje, y evitaremos que bultos pequeños puedan perderse en el traslado. También, de ser posible, es una buena idea elegir colores que resaltan o estampados brillantes para nuestras valijas, lo que ayudará a una más fácil visualización en la cinta transportadora una vez que llegamos a destino.