Sobre los pólipos uterinos y la alimentación adecuada

El útero incluye el cuello del útero, el pasaje conectado a la vagina, y el corpus, que lleva al feto en crecimiento durante el embarazo. Dentro de estas estructuras existen capas más pequeñas, como el endometrio, la capa más interna del útero. Los crecimientos celulares anormales pueden ocurrir en cualquier parte del útero, pero es el endometrio el más comúnmente afectado por la formación de pólipos y, en algunos casos, células malignas. El mantenimiento de su sistema reproductivo implica una dieta bien balanceada y nutritiva, así como hábitos de vida saludables.

Los picos anormales en el estrógeno, especialmente durante los años reproductivos están vinculados a un desarrollo anormal de células. Sin embargo, la causa exacta de la formación de pólipos o fibromas no se entiende completamente. Los pólipos, que son crecimientos conectados al endometrio, la pared interna del útero, pueden sobresalir en el cuerpo uterino. Por lo general son pequeños grupos no cancerosos de tejido uterino, mientras que los fibromas se componen de tejido muscular. Los síntomas de los pólipos y miomas son similares, y pueden incluir sangrado anormal, dolor pélvico y dificultad en algunos casos con el embarazo. Las pruebas de diagnóstico pueden revelar la condición exacta y la presencia o ausencia de células cancerosas. El cáncer de endometrio es la forma más común de cáncer del aparato reproductor en las hembras, sin embargo, la detección temprana y la extirpación de los pólipos pueden ayudar a reducir el riesgo de progresión del cáncer.

Aún se desconoce la causa de la formación de pólipos y puede que no seas capaz de prevenir la condición. Sin embargo, puede tomar medidas cautelares con su salud reproductiva al alimentarse de una dieta bien balanceada, en función de sus necesidades nutricionales como mujer y hacer revisiones ginecológicas regulares. Durante los años reproductivos, necesitas abundante calcio al día para un fuerte desarrollo de los huesos, hierro para mantener la salud de la sangre, ya que se pierde este mineral durante la menstruación, y la ingesta de calorías adecuada de alimentos saludables para mantener un ambiente nutritivo fetal en caso de embarazo.

Una dieta saludable y bien balanceada incluye variedad de frutas frescas, vegetales y granos enteros, idealmente con una porción de cada uno en cada comida. Las mujeres promedio necesitan 1.700 a 2.000 calorías por día para mantener un peso saludable y nivel de energía. Los vegetales crudos son también los bocadillos saludables y hacen platos sabrosos durante sus comidas principales. Los cereales integrales como el pan de trigo o pasta, cereal de salvado y arroz integral fomentan las energías calorías y no están llenos de sodio y azúcares. Las grasas saturadas se encuentran en la carne roja, lácteos, alimentos fritos y alimentos procesados, y ​​no son óptimas en una dieta saludable. Limite el consumo diario de grasa saturada a no más del 10 por ciento de sus calorías diarias totales y reemplaza estos alimentos grasos con fuentes más magras. El pollo al horno, pescado a la parrilla y productos lácteos con nutrientes y menos grasas no saludables pueden disminuir el riesgo de complicaciones de salud.