El líder, parte fundamental en la calidad.

María del Carmen Sáenz Maya*

*Licenciada en Psicología por la UMSNH, maestrante de Desarrollo Organizacional y Humano en la UNIVA Campus La Piedad. Psicóloga de PAIMEF en La Piedad, Michoacán.

Actualmente ser una empresa competitiva es sinónimo de ser una empresa de calidad. La calidad es importante porque nos permite tener certeza de que “está bien hecho”, “es el mejor”, “no se va a descomponer”, etc. Establecer estándares de calidad obliga a las empresas a dar lo mejor en sus productos y le da certeza y seguridad al cliente. Si los que hacen productos de poca calidad fueran juzgados como se hacía en los años 2150 A. C. seguramente las cosas estarían mejor hechas.

Pero no se trata de castigar a quien no ofrezca un servicio o producto de calidad, se trata más bien de que las organizaciones tomen la filosofía de Crosby, quien dice que “la calidad no cuesta”, la calidad debería de ser el fin más importante de las empresas, pues no solo ganan prestigio y mayor cartera de clientes, sino que el ahorro es sin duda alguna, mucho mayor. Si tomáramos esta ideología se ahorraría no solo en los tiempos de producción sino que también en materia prima, lo que trae como consecuencia un incremento en la eficacia y la eficiencia laboral entre otras cosas.

Una parte fundamental dentro de las organizaciones es el liderazgo, que esencialmente es aquella habilidad de influir positiva o negativamente en las personas, con el fin de tener un impacto significativo para lograr resultados importantes dentro de la empresa. Entonces es el líder quien tiene la tarea de hacer que los empleados cumplan o no con los objetivos específicos de la empresa, entre ellos la calidad, menciona (Gryna, Chua & Defeo, 2007) que el factor más importante al momento de implementar las estrategias de calidad es el liderazgo personal.

Evans & Lindsay (2008) afirma que “el liderazgo firme, sobre todo por la parte de la alta dirección, es necesario para desarrollar y mantener una cultura de calidad total” (pág. 212), por lo que el líder debe de contar con ciertas características que le permitan ayudar a su equipo de trabajo a cumplir con los objetivos de calidad establecidos, creando valores de calidad claros para integrarlos a la estrategia de la organización.

Los líderes efectivos se enfocan en cómo ser, cómo desarrollar la calidad, en sus valores, en su actitud y sobre todo en el carácter, sin embargo se considera que todo líder debe tener ciertas características y habilidades, como por ejemplo responsabilidad, humildad, integridad, perseverancia, creatividad, visión e intuición, entre otras.

Se puede concluir haciendo énfasis en que la influencia de líder dentro de las estrategias de calidad en las organizaciones es fundamental y necesaria, puede ser favorable o no, y esto dependerá de la capacidad motivadora y del estilo de liderazgo que se presente.

Referencias.

r Evans, J. & Lindsay, W. (2008). Administración y control de la calidad. Cengage Learning. México.

Gryna, F., Chua, R. & Defeo, J. (2007). Método Juran. Análisis y planeación de la calidad. Mc Graw Hill. México.