ESTUDIANTES OLFATIVOS EXIGEN SUS DERECHOS

En un artículo de portada “Los padres de los niños que aprenden con la nariz reclaman un plan de estudio de base olfativa”. Los redactores de la revista satírica THE ONION (2000), hacían una nota jocosa sobre la idea de que descubriendo un estilo de aprendizaje en una persona, desate un potencial indescifrable para poder aprender y así mejorar su rendimiento académico. Mucha gente cree que los todos los estudiantes podrían rendir de manera óptima si se descubriesen sus estilos de aprendizaje. No debería sorprender el reclamo eufórico de un grupo de padres que reclamen enérgicamente a sus hijos les enseñen con el olfato, se ha probado visualmente, se ha probado auditivamente, se ha probado kinestésicamente, pero al no ser su estilo de aprendizaje, resulta que los niños no aprenden. Aseguran que los niños que aprenden con la nariz no les gusta leer, ni hacer tarea. Deben desarrollarse métodos de aprendizaje que prioricen el aprendizaje nasal.

Naturalmente, la historia de los estudiantes con orientación educativa nasal es pura ficción, sin embargo no es tan alejada de la realidad. Basta con ingresar a cualquier buscador en internet y digitar ESTILOS DE APRENDIZAJE, para darse cuenta de la cantidad de personas o empresas que ofrecen herramientas de diagnóstico para en poquísimo tiempo saber cómo podemos aprender con mayor facilidad, dividiendo a las personas en VISUAL, AUDITIVO, KINESTESICO, etc. Partiendo de la premisa de todos los estudiantes pueden aprender bien siempre y cuando se cumpla con la condición de que se le ofrezca al estudiante el estilo de aprendizaje correcto.

En realidad resultaría tentadora la de que un maestro o profesor pudiera encontrar un estilo preferido de aprendizaje del alumno y con este hacerle aprender como un prodigio.

Sin embargo si nos permitimos analizar un poco más allá el tema, podemos encontrar al menos 3 razones por  las cuales pensar que los famosos estilos de aprendizaje no son nada más que una forma reducida de ver el proceso de enseñanza – aprendizaje.

PRIMERO.- No existe un consenso, es así que Honey – Mumford, dividen a los estudiantes en activistas, reflectores, teóricos y pragmáticos. Los creadores de la PNL dividen los estilos de aprendizaje en visual, auditivo, kinestésico, olfativo y gustativo.

SEGUNDO.- Si asumiéramos que las personas aprendemos con determinadas preferencias, tendríamos que asumir que este artículo solo lo estarían leyendo personas visuales, y las personas con preferencia auditiva que quieran saber que existe en un libro, tendrán que buscar algún visual que se los lea, y ni mencionar que tendría que hacer un kinestésico para saber lo que contiene un libro. Quisiera imaginar cómo pudo dar su primer beso un auditivo.

TERCERO.- Siendo una teoría que tiene por lo menos 30 años de vigencia y siendo tan socializada, ya hubiera cambiado en ese tiempo la realidad educativa de al menos gran cantidad de nosotros. Y no se hable aún de los estudiantes actuales.

Quizás resulte difícil que cualquier persona pueda leer un documento en donde se describa un perro rosado sin visualizar imágenes mientras lo hace, lo que pasa es que en realidad el planteamiento original es que posiblemente las personas al receptar el mundo exterior por medio de nuestros sentidos podamos de alguna forma hacer que simultáneamente se filtre la información por todos los sentidos, y no solo por uno en específico.