Colgantes con placas de acero, a la moda y muy útiles

El calor de estos días anticipa el verano y nos avisa de lo que está por llegar en los próximos meses. Casi está llegando el final del curso escolar.

Sólo pensar en lo que se viene encima, un sudor frío recorre tu espalda. Suficiente es todos los días desde la mañana hasta la noche, corriendo a llevarles al colegio y al sin número de actividades que desarrollan a lo largo del día y de paso los tienen ocupados. Todo milimetrado con tu rutina, para llegar al final de cada día con un suspiro de alivio.

Pero ahora se acerca la peor parte del año, aquella en la que los niños ya no tienen cole y  están todo el día en casa.

Nuestro sistema educativo prevé un extenso año escolar desde septiembre a junio. ¿Y luego qué? ¿que ocurre con Julio, Agosto y la mitad de Septiembre?.

No quiero que esto se entienda como una crítica al sistema educativo. Todas hemos pasado por esta etapa. Pero también nuestra infancia fué otra y ahora la competitividad, la falta de tiempo y la necesaria dedicación al trabajo de ambos progenitores, hacen que cuando llegan estos momentos de descanso del colegio, comienza para los padres uno de los momentos más arduos del año. Aquellos en los que ó cuentas con los abuelos o familia que de alguna manera te solucione el hecho de que no puedes atender a los críos personalmente, o desde luego tienes un problema. ¿qué hago ahora con los niños?

Al fin y al cabo, estarán en casa durante dos meses y medio. Todos queremos, que en la medida de las posibilidades de cada uno, además de descansar, ir a la piscina o a la playa, corretear por el parque; este período de tiempo sirva para algo más. Por eso, tratamos de llenarlo de actividades.

Para ello las opciones son múltiples y variadas, desde los clubs juveniles, los campamentos urbanos, hasta los campamentos y cursos de verano.

Si de entre las múltiples actividades que están disponibles has decidido enviarle a un campamento, ya te puedes ir preparando y organizar todo lo que se tiene que llevar el angelito para que esté lo más cómodo y seguro posible durante los días que va ha estar fuera de casa. Por eso antes de nada, es fundamental hacer una lista con todas las cosas que debes de incluir en la maleta.

Ropa y calzado adecuados, útiles de aseo. el repele insectos…

Comenzamos a pensar en cómo se arreglará sin nosotros y si todo irá bien.

Te propongo un detalle que puede ser muy útil en estas ocasiones y que puede solucionar más de un problema. Que lleve una placa con sus datos de contacto. Quizá el nombre y el teléfono sea suficiente. ¿Sufre alguna alergia?. Hay temas con los que no conviene tener dudas desde el primer momento. ¿tiene intolerancia a algún alimento?. Mil razones para que lleve su placa con esa información imprescindible para su seguridad y las placas de acero grabadas hacen las cosas más fáciles.

No lo dejes para el último minuto. Sin salir de casa, dinos lo que necesitas y te la hacemos llegar en una semana.

Vas a estar mucho más tranquila si la  lleva encima.

Bueno, ya sólo decir que con un poco de organización todo se supera. Para los niños son experiencias fantásticas y que no deben perderse.

Besos.