Mauricio en estado puro

Antes de conocer más sobre Mauricio, pensaba que era un destino exclusivo para los recién casados (muchos amigos habían elegido esta isla para sus vacaciones de luna de miel). Sin embargo, después de mi estancia quiero desmitificar lo que yo misma pensaba, y reconocer que es un sitio fantástico para todos los públicos y edades.
 
La isla multicolor es ideal para parejas sí, pero también para familias y amigos que buscan un sitio para descansar, o hacer un sinfín de actividades o disfrutar de playas paradisiacas.
 
Para mi lo más apasionante fue perderme por las carreteras y explorar la isla por mi cuenta. No hay nada de que preocuparse, es totalmente un lugar seguro. Cualquier rincón de la isla puede ser bueno para pararse a charlar con sus habitantes o disfrutar de sus increíbles atardeceres.
 
Durante tu estancia en Mauricio hay muchas cosas que puedes hacer, pero yo te voy a recomendar algunas que me dejaron huella especialmente:

1. Catamarán a Isla de los ciervos. Visita casi obligada. Un día pleno de relax y disfrute. Durante el trayecto se para a hacer snorkel donde ver coral y peces de múltiples colores. Se pasa por las cascada de Grande Riviere donde se pueden ver monos saltando por las ramas. Incluye un aperitivo y por fin la llegada a la isla de agua cristalina.
2. Port Louis, la capital de la isla, reflejo de la multiculturalidad, donde lo viejo y lo nuevo se entremezclan.
3.  Gris Gris, en Souillac se pueden ver unos acantilados donde las olas rompen con fuerza. Un lugar excepcional, donde perder la mirada y contemplar la naturaleza en su estado puro.
4.  Quatre Bornes, el mercadillo local de ropa y artesanía más auténtico de la isla de los domingos.
5. Parque Nacional Black River Gorges, donde se encuentran la cascada de Chamarel y la Tierra de los Siete Colores junto al parque de las tortugas de tierra, se encuentra rodeado de una vegetación impresionante, y sus colores son debidos a los volcanes, una curiosidad geológica que es un deleite para la vista.
6. Visita al jardín botánico Sir Seewoosagur Ramgoolan en Pamplemousses donde se pueden observar plantas y arboles indígenas rodeados de casas coloniales de antiguos gobernadores.
7. Pasear por Curepipe, un pueblo interior que no tiene desperdicio.
8.  Cap Malhereux, la punta norte de Mauricio, uno de sus rincones de mayor belleza, y por supuesto, un sitio muy recomendable para ver el atardecer.
9. Grand Bassin, centro espiritual hindú de Mauricio emplazado en el lago sagrado, Ganga Talao. Una parada para sumarse a la tranquilidad y paz que rezuma, y si queremos aprovechar a dejar unos minutos a la meditación.
10. El parque Domaine de Valriche en el sur, donde poder ver la naturaleza en estado puro. Se puede recorrer andando, en bici o coche 4x4.
11. Si tienes las oportunidad, puedes sobrevolar la isla en helicóptero, es emocionante donde la adrenalina sube a la misma velocidad que vas despegando de la tierra. Una de las cosas más espectaculares, es la cascada submarina de Le Morne, algo que solo se puede disfrutar desde el aire.
12. Playas de la isla de arena blanca en general.

Para disfrutar al máximo de esos días en la isla, yo recomiendo dos de los sitios donde pase la mayor parte de tiempo, alargándolo porque me parecieron de diez los dos, por una parte, Cotton Bay Resort & Spa , y por otro, & Spa . Ambos tienen unas instalaciones increíbles y con vistas al mar. Para mi, el alojamiento fue el colofón de mis vacaciones de ensueño.
 
Los hoteles de la isla en general ponen a disposición de los clientes todo tipo de deporte acuático y en concreto en mi recomendación anterior además podemos incluir el buceo, un paraíso para los amantes Isla Mauricio es desde luego, un sitio único para ver un interminable barrera de coral y peces exóticos de todos los tamaños y colores, y aguas cálidas.
 
Mi viaje a Mauricio fue una experiencia única, un lugar que recomiendo desde entonces a todos porque cumple con todo lo que cualquier viajero espera de unas vacaciones inolvidables.