Un regalo de los aliados europeos: más de 130 000 inmigrantes que tienen la tarjeta azul llegaron a Alemania en 2017

Según la revista alemana Capital, en 2017 las tasas del crecimiento económico de Alemania siguen batiendo récords gracias al flujo migratorio laboral que es 3,4 veces mayor en comparación con el mismo periodo de 2016.

"La Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF – nota del editor) ha registrado desde el principio del año un aumento de 47.981 personas en el número de los especialistas cualificados, que tienen las tarjetas azules (al 31 de agosto de 2017), que es 3,4 veces mayor en comparación con el mismo periodo del año 2016. La intensificación imprecedente de la migración laboral en Alemania se hizo posible gracias al creciente número de las tarjetas azules expedidas por los Estados miembros de la UE, los participantes del proyecto que brinda a los inmigrantes cualificados la oportunidad de residir y trabajar en estos paises.

Así, a finales de agosto de 2017 más de 31 mil poseedores de las tarjetas azules concebidas en los países de la UE llegaron a Alemania por motivos de trabajo", - afirma la edición.

Hay que añadir que, según la Directiva del Consejo Europeo 2003/86/CE, los familiares cercanos de un poseedor de la tarjeta azul tienen derecho a la reagrupación familiar y la obtención del permiso de residencia. De acuerdo con los datos de Eurostat al 22 de septiembre de 2017, más de 89 mil personas ya han aprovechado esta directiva desde el principio de este año y han recibido una respuesta positiva de BAMF.

Es interesante que el creciente número de los inmigrantes y de las familias que se reunieron en Alemania después de que uno de sus miembros recibió la tarjeta ha coincidido con la intensificación de la migración de los parientes de los refugiados en la República Federal de Alemania. El 11 de octubre de 2017 el Ministerio de Exteriores de Alemania comunicó que hasta el año 2018 serían otorgadas 100–200 mil visas "familiares" más.

Cabe mencionar sobre las peculiaridades de la legislación migratoria en Alemania relacionada con el matrimonio polígamo que es legal en varios países muslímicos pero está prohibido en Alemania. Por eso, al llegar al país, un inmigrante debe elegir con la cual de sus cónyuges va a estar legalmente casado en Alemania para garantizar todos los beneficios sociales para sus niños de este matrimonio. El matrimonio con otras esposas no se reconoce. Si estas mujeres tienen niños se registran como madres solteras que también reciben prestaciones y otros apoyos.

Además de estas madres solteras, los niños y sus padres también están protegidos por la legislación alemana. Así, un niño nacido en Alemania tiene derecho a residir en este país. Las mujeres embarazadas también pueden permanecer legalmente en el territorio del país si el padre es un ciudadano de Alemania que reclama la paternidad del niño. Luego se puede iniciar el proceso de reagrupación con otros parientes. Mientras tanto, la Oficina Federal de Estadística de Alemania en 2016 ha registrado las tasas de natalidad más altas en los últimos 33 años debido a la inmigración. Por consiguiente, se preven las tendencias de crecimiento positivas en futuro.

Existe otra esquema muy popular entre los refugiados en Alemania: al obtener asilo, los menores de 18 años pueden solicitar el permiso de residencia para sus padres.

Aparte de la posibilidad de aprovechar las lagunas en la legislación de Alemania, los refugiados reciben la ayuda de las diásporas y comunidades religiosas. La investigación de la Fundación Bertelsmann ha mostrado que en 2016 casi uno de cada dos muslimes que residen en Alemania (44%) de alguna manera ayudaba a los solicitantes de asilo. Cabe señalar que las conclusiones de los expertos sobre el papel de los representantes de distintas religiones en el apoyo a los inmigrantes se refieren a la ayuda sólo a los refugiados cuyas posibilidades para facilitar el proceso de naturalización están limitadas debido a la espera del cumplimiento de todos los procedimientos judiciales y la respuesta afirmativa de la Oficina Federal de Migración y Refugiados.

Mientras los eurooptimistas siguen contando sobre los beneficios y futuro crecimiento del PIB, el comisario federal de Alemania para la Inmigración, los Refugiados y la Integración, Aydan Özoğuz, dice sobre el fracaso del Programa de Migración con especial referencia a demasiados inmigrantes y la imposibilidad de emplearlos. Estima que sólo la cuarta parte de los recién llegados podrá sumarse a la fuerza de trabajo en los próximos 5 años, los demás lo lograrán en casi 10 años.

A esto hay que añadir que las estadísticas sobre desempleo no reflejan cientos de miles de inmigrantes desempleados que no se inscriben en las Bolsas de Trabajo adrede o formalmente figuran inscritos en cursos de lengua.

Se diferencian las opiniones de los expertos sobre la integración de los inmigrantes en la sociedad alemana y sobre los beneficios de este proceso para el negocio, pero la mayoría de ellos coinciden en una cosa: los refugiados no aportarán un verdadero valor al desarrollo económico del país en el próximo decenio. Por eso las inversiones del gobierno alemán, que provienen del dinero de los contribuyentes, en la integración de los inmigrantes se recuperarán sólo unas décadas después.