¿Son convenientes las apuestas deportivas?
A los aficionados a los deportes muchas veces les gusta hacer su pasión más interesante a través de las apuestas, pero ¿son convenientes?
Las personas que disfrutan haciendo apuestas deportivas a veces son las mismas que se jugaban un helado o unas pocas monedas para apoyar a su equipo favorito pero otras son expertos en un deporte que ven esta práctica como otro tipo de inversión.
Ya sea que hayas elegido asumir los riesgos que implica invertir en la bolsa de valores o que quieras hacer dinero rápido apostándole a tu equipo favorito de fútbol, es conveniente que pienses en dónde vas a poner tus recursos y si realmente tienes posibilidades de ganar, sobre todo a largo plazo, pues como en las finanzas se debe tener el estómago fuerte para asumir las pérdidas que llegan tarde o temprano.
Las apuestas deportivas, como todo en el mundo, no son ni buenas ni malas, son sólo una actividad que se puede llevar de una manera más o menos recomendable. Si, por ejemplo, vas de vacaciones a un hotel grande que tiene casino es muy probable que pases un par de horas halando una palanca para probar tu suerte pero si, por el contrario, una vez pierdes dinero sientes la obligación de quedarte para recuperarlo es mejor que te mantengas lejos de esas salas de juegos. La ludopatía es un problema tan serio como el alcoholismo o la drogadicción que no siempre se detecta a tiempo.
Piénsatelo dos veces antes de hacer una apuesta deportiva si antes ya has tenido problemas con alguna aplicación que te creó una adicción, esa que al comienzo prometía dártelo todo gratis para luego cobrarte por cada token o extra que te mostraba. Los proclives a la adicción al juego hacen más alejándose de bookies y casas de apuestas en general pues pueden terminar involucrados en problemas graves que pueden afectar su trabajo y sus relaciones familiares.
Si por el contrario tienes claro que el mundo de las apuestas deportivas es sólo otra alternativa entre las muchas que existen para hacer un dinero demás adelante, teniendo presente eso sí que lo que apuestes no debe hacerte falta porque si bien puedes perder ahora para ganar después no sabes ni puedes controlar cuándo recuperarás la pérdida.
Así como en el mundo financiero se aconseja evitar poner todos los huevos en la misma canasta, en las apuestas deportivas también puedes aplicar este principio. Al comienzo quizás quieras probar apostando en deportes diferentes, que ya es de por sí un tipo de diversificación, luego en la medida en que te especializas y aprendes del que más te gusta o simplemente del que más entiendes, puedes variar tus inversiones de un modo distinto.
Apostar a diferentes equipos en distintas modalidades o en torneos simultáneos son algunas de las opciones disponibles. Aprender a apostar es, como con otros saberes, un asunto de dedicación y tiempo. Puedes oír a especialistas en cada deporte que hacen pronósticos para luego revisar si se cumplieron o no. Este ejercicio te servirá para identificar voces con autoridad en el deporte que prefieres y para saber quién entiende de verdad y quién es sólo un charlatán.
Finalmente ten presente que cuando apuestas dinero en realidad estás apostando tiempo. El dinero puedes recuperarlo pero no el tiempo que dedicas a ganarlo así que piénsatelo bien antes de acercarte a una casa de apuestas, evalúa tu estado de ánimo y tus habilidades para interactuar en situaciones de alto estrés y ansiedad porque si algo te podemos asegurar es que poner en juego tu dinero es todo menos un pasatiempo tranquilo.
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