Tartas de queso

¿Quién en su vida no ha tenido la oportunidad de probar una tarta de queso?. Supongo que la mayoría de las personas han llegado a probar la tarta de queso alguna vez en su vida, puesto que la tarta de queso es una de aquellas delicias que nos permite la cocina de los días de hoy a las que pocos podrán resistirse, a menos que tengan una razón fuerte para hacerlo. Si eres una de esas pocas personas que no han probado la tarta de queso, déjame decirte que puedes considerarte casi único puesto que este es un producto de cocina que casi todo mundo conoce.

Lo primero que puede uno preguntarse cuando le dicen que se hace único cuando no ha probado la tarta de queso es ¿y eso acaso significa alguna ventaja para mi?. Pues la verdad eso no significa ninguna ventaja para nadie, pero tampoco significa una gran desventaja, puesto que es posible que hayan personas que no les guste el queso y no hayan querido probar la tarta de queso en su vida aunque hayan podido hacerlo en cualquier momento de su existencia. Así que, a mi no me corresponde decir que si usted no ha probado la tarta de queso eso es bueno o malo, simplemente puedo decir que es un hecho del que no tengo yo ningún derecho a juzgar si esta bien o mal.

A estas alturas de este artículo el lector dirá: ¿y a que viene todo este cuento con la tarta de queso tan superficial y salido de tema?. Probablemente ustedes descubran que esta discusión sobre quienes han probado la tarta de queso y quienes no la hayan probado no tenga ningún sentido. También es posible que después de leer todas las líneas descubran que realmente tengo un mensaje acá utilizando la tarta de queso, ese manjar delicioso de la vida de los días de hoy, como excusa para decir algo mas, tal vez algo mas profundo. Pero, una vez mas, me atengo a mi manera de pensar, decidir si lo que digo acá tiene sustancia o no tiene le corresponde a cada uno, no me corresponde a mí.

“No siempre todos tenemos que hacer todo lo que la gente hace”. Esa frase se ha vuelto hasta aburridora de leer. Tal vez muchos dirán a quienes hayan pensado en el problema de quienes no han probado aún la tarta de queso que eso es lo que se aplica: No tienes que hacer todo lo que toda la gente hace y eso incluye que no tengas que probar la tarta de queso por mas deliciosa que sea. Pero esa forma de pensar no me satisface. La verdad es que, si mucha gente hace una misma cosa, probablemente esa cosa sea buena. También es probable que sea una basura. Pero muchas veces las personas convierten en criterio de decisión para hacer una cosa u otra el siguiente: “si una cosa la hacen muchas personas, entonces no puede ser buena, pues la masa es estúpida”. Se que así piensan muchos, y para estas personas la consecuencia respecto a las tartas de queso es que no las van a probar siquiera, puesto que ya tienen predefinido como decidir en estos casos.

A mi me parece que lo mejor es decidir por si mismo respecto a comer o no tartas de queso. Ya que tanto el que decide comer tarta de queso porque muchos lo hacen como el que decide no hacerlo porque muchos lo hacen, lo hace compelido por los demás y no toma una decisión propia. Así que, mi consejo es, prueba la tarta de queso y decide.