Geolocalización: La que se nos viene encima (I parte)
En Wikipedia, encontramos la siguiente definición del término "Geolocalización": ..."refiere al posicionamiento con el que se define la localización de un objeto espacial (representado mediante punto, vector, área, volumen) en un sistema de coordenadas y datum determinado".
Localización de un "objeto espacial" en un "sistema de coordenadas".
La que se puede montar en Internet. El "sistema de coordenadas" lo tenemos en forma de mapas. Así pues, sólo hay que insertar la información en el sistema para que todo el mundo pueda verlo. Y tómese "todo el mundo" en el sentido literal.
Bien, una empresa puede geolocalizarse en un lugar determinado para que esta información sea pública y accesible. Mayor visibilidad, por supuesto. Pero no sólo esto... sus posibles clientes se están habituando a buscar en el mapa en Internet. Si no estás en el mapa, no existes. O bien, peor aún, genera un pensamiento similar al siguiente: "¿cómo es que esta empresa no está en el mapa?.
Un paso más allá. Tradicionalmente, los "avanzados administradores del sistema" eran los que incluían esta información. Pero, si tenemos un mapa en Internet visible para todo el mundo, no tiene sentido que todo el mundo tenga vetada su posibilidad de inserción de puntos geolocalizados. Así pues, surgen mapas "colaborativos" en los que la gente, de forma sencilla, realiza localizaciones y anotaciones igualmente visibles para todos.
Aquí comienza la madre del cordero; las herramientas existen, ahora sólo falta examinar su potencial dependiendo del tema elegido. Veamos con ejemplos:
Una administración pública pone a disposición de los usuarios un mapa para que inserten sus fotografías sobre puntos concretos de la ciudad. Una asociación pone un mapa colaborativo para inserción de puntos negros en las carreteras. Un grupo de estudiantes pone en marcha un mapa colaborativo para insertar bares recomendados en una ciudad.Ahora bien, ¿qué tal este tema?: Una asociación pone en marcha un mapa sobre el que insertar alertas urbanas. Los ciudadanos, colaborativamente, indican qué cosas no funcionan en un municipio determinado.
No tiene discusión: los ciudadanos tienen cosas que decir y herramientas para hacerlo. Ahora bien, ¿Estamos preparados para recibir su opinión?
Es imparable. Las herramientas están. La actitud, cada vez más (por devoción o por obligación).
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