Anunciese Aquí

Registro automático

Acceder con Twitter

top articulo
twitter
facebook
Rss
viernes 19 de abril del 2024
Lea, publique artículos gratis, y comparta su conocimiento
Usuario Clave ¿Olvidó su clave?
¿Iniciar sesión automáticamente en cada visita?
Inserte su correo electronico

Galimatías literario en el arte actual

veces visto 2179 Veces vista   comentario 0 Comentarios

Galimatías literario en el arte actual

Cuando uno intenta profundizar sobre el sentido y la coherencia de la terminología usada en el conceptual mundo del arte actual, te da la sensación de que tu ignorancia es extrema, ya que no se consigue entender casi nada de lo que se está leyendo. En la mayoría de las críticas sobre arte de los periódicos o magazines, una serie de palabras “biensonantes”, entrelazadas con singular ingenio, intentan explicar las intenciones y la calidad plástica de un artista que probablemente ni el propio artista podrá entender. Tomemos al azar uno de esos breves escritos:”… Es un artista que se caracteriza por desarrollar una idea plástica con notable coherencia, seguridad en su trabajo y fidelidad a ese pensamiento que traduce en formas muy personales, como las “planoetrías”, definidas como volúmenes que evolucionan en un único plano. Su obra es un trabajo de evidente sutileza, con diferentes sugestiones lineales y estructurales capaces de diversificación en la materia, en la forma y en la proyección espacial, a la vez que sugestivos valores de rítmica musicalidad plástica en el proceso creativo”

Leído esto tengo que reconocer que he entendido las palabras pero no el contenido,  y sé que esta ignorancia no es políticamente correcta ni conveniente para posicionarme en un lugar privilegiado de la élite artística. Lo políticamente correcto es dar la sensación ante los demás de que este lenguaje intelectualoide nos es familiar y que no existe ninguna duda  sobre su comprensión. Algunos podrán rebatir que todas estas palabras adquieren un sentido cuando se ve la obra, pero yo les aseguro que teniendo delante la obra, ni el mismísimo Nietzsche o Kafka podrían descifrar semejante galimatías. Por otra parte, resulta curioso que en todas estas críticas, siempre se ensalza y masajea al autor de la obra, nunca se le critica de manera negativa como se hacía antaño en la época del impresionismo y en los comienzos del siglo XX. Leyendo estos textos tan “biensonantes” resulta que todos los artistas son el “no va más” dentro del mundo artístico; un vapuleo a tiempo, merecido y bien argumentado por un buen conocedor del arte, podría ser un buen remedio para acabar con tanta mediocridad.

Pero continuando con algunas de estas palabras tan utilizadas y manoseadas actualmente en el mundo artístico -literario,  hay dos términos en especial que me producen una especial aversión: me refiero concretamente a “contemporáneo”  y “vanguardia.  Al  escuchar o leer estas palabras me siento un proscrito, como si yo no perteneciera o no tuviese la capacidad de pertenecer a este grupo de “contemporaneovanguardistas” de la “gran élite artística”; en definitiva me dan un cierto repelús y me siento marginado en el más puro sentido de la palabra. Cada vez que oigo esas dos palabrejas o las veo escritas en alguno de estos numerosos magazines de arte o en cualquier otro medio de comunicación, me desconcierto, no consigo entenderlas ni saber si yo, un ser humano que vive en este siglo XXI y que intenta hacer su trabajo lo más acorde posible con el tiempo en el que vive, pertenezco o puedo pertenecer a esta categoría de privilegiados.

Lo cierto es que no, rotundamente no pertenezco ni me siento identificado ni implicado con ellas, y no porque etimológicamente no esté de acuerdo con esta definición (del latín “contemporaneus”, existente al mismo tiempo que otra persona o cosa), sino porque simplemente estoy en desacuerdo con el sentido que le pretenden dar algunos espabilados artistas y sus secuaces en su propio beneficio. Para esta élite de “pensadores” el arte actual debe ser transgresor, romper con todas las normas establecidas, sorprender, ser original a cualquier precio y de cualquier manera, y todo ello en detrimento del oficio de pintor, del simple hecho de pintar, de pintar con profesionalidad, utilizando con buen criterio el uso del color, la composición acertada y el buen gusto por las cosas bellas y bien elaboradas, en definitiva, que la estética prevalezca sobre la idea y el concepto, que esté por encima de la “literatura” que estos “pensadores” pretenden hacernos creer ver cuando miramos un cuadro o cualquier otra “creación” que intentan hacer pasar por arte. La creatividad de una obra de arte no consiste en hacer algo “rompedor”, excéntrico y  que nadie haya imaginado nunca (en la mayoría de los casos suele ser de mal gusto), sino que en la propia realización personal y única de un  artista de talento,  la originalidad y la creatividad aparecen y fluyen espontáneamente, igual que la caligrafía de cada persona es única e inimitable. La gente corriente, la gente de la calle, que es la gran mayoría y que es en definitiva a la que van dirigidas las obras que los artistas realizan, no entienden lo que ven ante sus ojos cuando miran este tipo de obras “antiarte”, no les llega al alma y en la mayoría de las ocasiones esta confusión hace que exclamen: “¡Es que yo no entiendo de pintura!”.

Pero para gozar de la pintura no es primordial entender de pintura; la pintura y el buen arte se siente, se ama, toca nuestra fibra interior, se escucha como se escucha la buena música y según la sensibilidad de cada persona se aprecia y se disfruta de manera diferente, pero nadie debe hacer “literatura”, hacer que nos guste mediante la palabra aquello que no nos llega a nuestro corazón a través de la vista. Sí, es bien cierto, que  si conocemos la evolución de la pintura y sus diferentes “ismos”, en definitiva, si  la conocemos más profundamente, nos será más fácil apreciar y diferenciar el buen arte del que no lo es, pero nunca debemos dejarnos influenciar por la verborrea de unos cuantos malabaristas de la palabra, que entrelazando algunos términos sofisticados y de difícil comprensión (que nadie, ni siquiera ellos mismos comprenden) intentan hacernos ver la trascendencia de algo que es insustancial y carece de valor artístico.

Sí se puede, mediante la palabra del buen crítico o entendido (y con ello quiero dejar claro que sí existen buenos y auténticos historiadores y comentaristas de arte), abrirnos al conocimiento y mostrarnos con claridad el porqué aquel artista ha compuesto o elaborado aquellos colores y cómo de esta manera ha conseguido aquel resultado que tanto nos deleita, pero nunca dejarnos embaucar por explicaciones conceptuales e incomprensibles por parte de personas que no están capacitadas para ello.

La otra palabra que me resulta urticante, “vanguardia”, que en el sentido artístico significa “aquellas tendencias artísticas que se afirman por el rechazo de pautas anteriores y ponen en entredicho las mismas premisas de su ámbito anterior”, también se tendría que entender no en un sentido tan radical como estos nuevos “vanguardistas” pretenden atribuirle. Ningún artista auténtico que se precie rechaza de manera radical las tendencias anteriores; todo lo contrario, las considera, las analiza, las conoce y a partir de ellas las hace evolucionar consiguiendo una nueva forma de hacer propia. Las pautas anteriores le sirven para desarrollar su manera particular y diferente de expresarse. Es una evolución lógica, una ayuda más que un rechazo sistemático.

Después de la pintura que llamamos clásica o el realismo de principios del XIX, ya a finales de este mismo siglo los impresionistas evolucionaron hacia una pintura más abreviada, en la que el detalle perdía parte de su valor en favor de la espontaneidad de la pincelada, descomponiendo la luz que incidía sobre los objetos de manera más fragmentada. Más tarde los postimpresionistas dieron un giro al arte de la pintura liberando la forma y el color según sus propias sensaciones, utilizando y transformando estas dos herramientas en función de la superficie del cuadro, consiguiendo de esta manera una mayor expresividad plástica. Pero todo esto se sucedía de una manera escalonada, razonada, con una buena base artística, con el oficio previamente bien aprendido.

Ciertamente también existía una “vanguardia” que eran todos estos nuevos “ismos” emergentes y una pintura oficial que marcaba las pautas y los cánones a seguir, y había rivalidad entre los nuevos movimientos de vanguardia y un deseo por liberarse de la pintura oficial más academicista, pero siempre con un profundo conocimiento y respeto por los logros pictóricos conseguidos en otra épocas. Los propios artistas escribían, editaban  revistas o almanaques con su grupo de seguidores, ya fueran artistas, poetas, escritores o músicos y hablaban acerca de la cultura y de la actualidad del arte en general, pero siempre o casi siempre con un conocimiento exhaustivo de la materia. Si se conocen algunas de estas manifestaciones literario-artísticas como el Almanaque Der Blaue Reiter (El Jinete Azul), grupo formado en Munich en 1912 por Vasily Kandinsky y Franz Marc, o las teorías de los franceses puntillistas como Signac y Seurat, o la correspondencia escrita entre los propios artistas  del grupo Nabis como Paul Gauguin y sus seguidores Maurice Denis, Emile Bernard o entre los fauvistas Matisse y Derain y, por otro lado, el gran Delaunay que desarrolló la teoría del efecto simultáneo de los colores complementarios, uno se da cuenta de la solidez y el conocimiento profundo, científico y artístico de sus reflexiones. Basta dar una leída a todo este gran despliegue de talento artístico y bien razonado para darse cuenta de que la “literatura” del arte actual deja mucho que desear. Y lo más negativo de todo ello es que toda esta operación de “marketing” y “literatura” barata y engañosa lleva al público aficionado a un desconcertante desconocimiento del verdadero buen arte. Confiemos en que esta lucha, que sin lugar a dudas, deberá enfrentar en un futuro a intelectuales, escritores, críticos, aficionados al arte y artistas, que reconocen el verdadero valor del trabajo de calidad y bien elaborado, contra los que pretenden hacer del arte un negocio fácil, ponga las cosas en su lugar y desenmascare a toda esta “troupe” de farsantes haciendo que toda esta mediocridad caiga por su propio peso.

Guillermo Martí Ceballos

Artista Pintor

La emoción del arte

Clasificación: 2.1 (18 votos)
Está prohibido copiar este artículo. Artículo.org no permite la sindicación de sus artículos.
Acerca del autor

Ceballos

¿Tiene comentarios o preguntas para el autor?
Artículos recomendados
Chávez terminará el auditorio Simón Rodríguez
Escrito por Juan Camilo Cano, Añadido: 13 de Ago, 2010
Santa Marta - Colombia La visita del Presidente Venezolano Hugo Chávez a la Quinta de San Pedro Alejandrino no solo significó la reconciliación diplómatica entre Colombia y Venezuela sino también permitió dar luz verde a la continuidad de la construcción del auditorio ‘Simón Rodríguez’, en predios...
veces visto 3434 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
La historia de la guitarra española y como aprender a tocarla
Escrito por Edgardo , Añadido: 10 de Jun, 2010
La guitarra es uno de los instrumentos musicales más populares. Es un instrumento de seis cuerdas, de caja de madera con un mástil sobre el que va el diapasón. Existen infinidad de variantes de la guitarra, desde la guitarra clásica o de concierto, hasta el guitarrón que usan los mariachis en México, pasando...
veces visto 3670 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
¿Por qué las Cestas de Navidad son tan populares?
Escrito por Mark_Kol, Añadido: 14 de Jun, 2011
Alguna vez te has preguntado '¿Qué estás haciendo por los demás? "  En el mundo acelerado en que todos vivimos, el tiempo nunca es suficiente para obtener las cosas que realmente importan. Siempre estamos un poco atrás y si pudiéramos ir un poco más rápido, solo asi podríamos lograrlo. El problema es...
veces visto 2756 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
5 Jurados Internacionales elegirán a la nueva Señorita Colombia
Escrito por Miguelx2, Añadido: 10 de Nov, 2010
La competencia por la conquista de la corona de Señorita Colombia comenzó en firme este sábado, con el arribo a Cartagena del tradicional vuelo real con las 24 mujeres colombianas aspirantes al título. En el Concurso Nacional de Belleza cinco invitados internacionales serán los encargados de elegir a la...
veces visto 2776 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
TV via satelite para su computadora
Escrito por carkelsor, Añadido: 06 de Sep, 2011
En sólo 5 minutos su ordenador se convertirá en una TV! No necesita plato, receptor, ni nigún tipo de servicio de cable o satélite Todo lo que usted necesita es una conexión a la Internet y un ordenador. Vea todos los canales del mundo que usted quiera. Miles de usuarios gozan ya de una increible...
veces visto 2216 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios