El almizclero del Himalaya

El almizcle[1] es una substancia valiosa, extremadamente aromática, contenida en una bolsa bajo la piel del abdomen del almizclero macho que habita en los elevados picos del Himalaya. Cuando el almizclero alcanza cierta edad, el olor penetrante del almizcle comienza a exudar de esa bolsa. El almizclero se excita por el aroma delicioso y se mueve para acá y para allá, olfateando bajo los árboles y matas, buscando en todas partes –a veces durante muchas semanas -, procurando la fuente de la persistente fragancia.

Incapaz de localizar el perfume embriagador, se vuelve extremamente inquieto y, en seguida, irritado. En su agitación, en un último esfuerzo y desesperado por encontrar la fuente de la esencia enloquecedora, se sabe de casos en los que el almizclero salta entre los altos picos acantilados y cae hacia la muerte en el valle que se extiende abajo. Los cazadores, cuando encuentran los cadáveres, cortan la anhelada bolsa del almizcle.

Um bardo iluminado cantó cierta vez:

"O atolondrado almizclero: buscaste La fragancia en todas partes, excepto en tu propio cuerpo. Eh ahí por qué no la encontraste. Si al menos hubieses mirado en tu búsqueda, hacia ti mismo, habrías encontrado el almizcle anhelado y te habrías salvado de la muerte sobre las rocas, debajo de las montañas".

La mayor parte de las personas se comportan como el almizclero. Buscan la felicidad escurridiza, siempre fragrante, por todas partes, fuera de ellas mismas. Y cuando finalmente, no pueden hallar la verdadera felicidad, cuya fuente yace oculta en los recónditos secretos de sus propias almas, saltan por los picos acantilados de las esperanzas elevadas y se despedazan en las piedras de la desilusión.

Atolondrado almizclero humano, si por lo menos tornases tu mente para adentro, en la meditación diaria profunda, encontrarías la fuente de toda verdadera y duradera felicidad, en el silencio mas recóndito de tu propia alma. ¡Bien amado que estas procurando la felicidad: no seas como el almizclero, pereciendo en la búsqueda al exterior: despierta! "Y en la caverna de la meditación profunda, encuentra la felicidad eterna dentro de tu ser inmortal"

Notas:

Autor: Paramahansa Yogananda. Traducción al español de Enrique del Río, originalmente publicado en: "Psicoterapia Corporal México"

[1] Almizcle: substancia blanca aromática que se extrae de una bolsa que tiene en el vientre el almizclero, un mamífero rumiante sin cuernos del tamaño de una cabra.