Así quiero lo nuestro...!!!

Mi pequeño amor:

 No sé cómo explicarte lo que siento, has provocado un torbellino muy grande en mi vida, un cambio muy profundo, algo que me perturba, nunca en mi vida fui miedosa ni temía a nada, pero ahora sí, nunca había experimentado éste sentimiento, ésta confusión, éste deseo de querer tenerte a mi lado, a cada momento, querer abrazarte y contenerme, querer rozar tu piel y no atreverme, querer besarte siempre. Lo confieso, me perturbas demasiado y lo que es peor no sé que hacer contigo.  Aveces siento que te quiero, que quiero a tu sonrisa de niño alegre y despreocupado, que quiero a tu fuerza, arriesgada y segura, que quiero a tu carácter firme y decidido, que quiero a tu ternura cuando me evitas un esfuerzo, que quiero a tu cuerpo suave y sereno, que quiero gritar que te quiero, sí…¡Te Quiero! Como algo muy nuevo, como mi ilusión primera, como algo que me llena desde muy adentro, que me renueva y me da ganas de vivir, de seguir adelante, de no parar y buscarte. En ti lo he encontrado.

  Pero a ti que puedo ofrecerte, quiero llenarte en mis noches, con mis pensamientos, llenarme de ti, de tus recuerdos, sentirte cerca, yo no soy tu dueña ni yo te pertenezco, y se me llena de rabia el alma y el cuerpo, de no poder tocarte, de no poder sentirte, de no saber que hacer y ahogarme, ya muchas noches he tenido que ahogar tu nombre en mi garganta y lo que es más, una lágrima desesperada, por este amor que se me escapa, porque estoy atada a una vida que ya no es la misma,  porque quiero gritar que me siento sola, pero nadie me escucha y a nadie le importa.

  ¿Porqué tuvo que ser así? Sólo Dios lo sabe y porqué me pasa todo esto,  no sé que pensar, que sentir, estoy tan vacía por dentro o talvez tan llena y frustrada, que temo abrir mi corazón una vez más a ti, y equivocarme, pero quiero probar, quiero arriesgarme, quiero sentir como no lo había hecho antes, quiero sentirme importante, necesitada, querida, quiero ser lo primero en tu vida,  pero no sé si puedas hacerlo, no sé siquiera si lo merezca, sólo sé que quiero amarte y que tu me ames, no con pasión sino con ternura, como cuando aprendemos a amar y lo damos todo, como cuando nuestra mente no tiene malicia, como cuando en una sonrisa, en una mirada, se entrega todo, como cuando entregas una flor o acaricias un juguete, como cuando oyes una canción y te emocionas, como cuando lo dices todo sin decir nada, como un amor en silencio que te quema por dentro, como un todo callado que se da cuerpo a cuerpo, como lo más grande, como lo más bello, como lo más tierno, … ¡así quiero lo nuestro!