Un negocio en Internet propio es igual a tener un sitio web propio

Cuando no tenemos una web de nuestra propiedad, todo el marketing que hayas repartido, completamente todo lo que has publicado y todos los vínculos que entregado online, serán para los sitios web de otra gente. Cada vez que escribes acerca de un sitio web, estarías haciéndole el negocio a otro sin cobrar nada por ello. Manténlo en la cabeza porque es la gran diferencia que existe online entre inquietos lobos y mansas ovejas.

Enorgullecerse de disponer de un negocio en Internet y de trabajar online para no tener jefes, no es realizar llamadas telefónicas o por Skype para vender, ni mensajearse continuamente por Messenger para explicarse, ni agolparse con gente para influenciarles, ni tampoco lo es plagiar molestos anuncios vendedores en Twitter para que las personas contacten con el distribuidor... ¡e intentar hacerles una encerrona con algo! Ni mucho menos eso es trabajar online o tener un negocio basado en Internet; en todo caso sería marketing telefónico o venta personal, ya que las ganancias se ganan hablando en persona con alguien, ya sea a través de un micrófoco, o en una presentación cara a cara, o en una charla online.

Trabajando mucho tiempo desde mi PC, se ve a mucha gente que intentan trabajar online, y la gran mayoría acaban dando tumbos entre idea e idea, haciendo venta telefónica o vendiendo cara a cara, desperdiciando mucho tiempo intentando aprender la fórmula que les haga generar ingresos, cometiendo demasiadas veces los mismos fallos, y sin saber a ciencia cierta qué es lo que están realizando mal (o lo que no están haciendo).

Si pretendes tener un negocio online de verdad, y ser un auténtico lobo de Internet, tienes que olvidarte lo antes posible de intentar vender productos en persona. Una oportunidad de negocio que requiera un contacto directo, físico o verbal, no es un negocio automatizado online automatizado, y perderemos cientos de horas convenciendo a clientes potenciales para intentar venderles tu oferta.

Olvidémonos de lo que sabemos por un instante. En los negocios "de la calle", el mejor distribuidor es el que más seguridad y mejor estampa transmite, el más cumplidor y arrollador, el que más maña comercial posee, el que mejor conoce el servicio y el que mejores órdenes hace al trimestre. En el mundo online, el mejor informador que existe, es tu web, que no sólo reúne los requisitos anteriores sino que, incluso, siempre está trabajando las 365 días al año, siendo capaz de convencer a decenas de personas al día, permitiéndote fabricar dinero online incluso mientras duermes. Únicamente hay que protegerlo, arrullarlo y promoverlo, y él se encargará de darte docenas de felicidades el resto de los días venideros. No obstante, hay que hacerlo con tu propio sitio web, no con el resto.

El primer requisito para ser un auténtico y ambicioso cazador de Internet, y conseguir trabajar desde cualquier parte del mundo, es comenzar a construir un negocio basado 100% en Internet. Si no lo tenemos, tendrás que convertirte en comerciales, enfundarnos traje y pajarita de vendedor, y prepararnos mentalmente para tener docenas de noes y negativas. Y yo no sé tú, pero no es plato de buen gusto, tener que asaltar y perseguir en persona a los clientes potenciales para intentar venderles algo, ya que opto por que lo haga un negocio en Internet mecanizado.

Como no caben dudas, el único hecho de ser el propietario de una página web no te asegura las ganancias en Internet. Hay algunos requerimientos que son característicos de cada ser humano. O se nace con ellos o se consiguen, pero son necesarios para lograr grandes cosas en un negocio, no sólo en Internet, sino también en la vida. Dicho esto, si realmente quieres tener tu negocio en Internet propio y empezar a "fabricar" ganancias de forma mecanizada, necesitas una web que venda sin tú darte cuenta inmediatamente, y un servicio de hosting especializado para emprendedores que tenga a tu disposición un entrenador personal. Busca en Internet y encontrarás compañías como iWolf Hosting dedicadas exclusivamente a esa labor.