Tudor Heritage Black Bay

Desde el año 2012 la firma de relojes Tudor presenta dos grandes novedades cada año. El modelo Heritage Black reinterpreta un estándar nacido en los años cincuenta y que marco doblemente la historia del reloj de inmersión. Lanza también el modelo Tudor Pelagos estanco hasta los 500 metros y se resumen por ser una concentración de técnica e innovación al mismo tiempo.

Su temperamento deportivo y su fiabilidad ausenta de fallo sabrán responder a las exigencias de los grandes fondos marinos y a todos los amantes de este elemental medio que es el mar y el océano. Con estos dos modelos dedicado al mar, la firma de relojes Tudor demuestra no solamente el valor de su patrimonio rico por más de seis decenios, pero igualmente por su capacidad de empujar a la historia para proponer sus productos a la perfección durante todo este periodo de tiempo. Icono de estilo retro y chic, la marca de relojes Tudor afirma más que nunca esta genética aliándose de manera potente con la estética y la demostración de técnica.

Impregnado por la atmosfera particular de una niebla misteriosa que va descubriendo poco a poco los misterios a aquellos que se aventuran en su interior. El nuevo modelo Tudor es un tesoro longevo que reaparece de la superficie. Su ultima aparición en la colección Heritage lanzada en el año 2010 y que se fijo en la misión de acoger los modelos icónicos de la marca, inspirados de su pasado y revisados. El reloj  Black Bay es una perfecta encarnación del espíritu vintage de Tudor.

Si responde a todos los puntos y a sus aspiraciones estilísticas del momento, el modelo Tudor esta inspirado en un reloj de inmersión que vio la luz por primera en el año 1954 y que desde entonces la marca lo ha visto crecer y evolucionar de manera constante hasta los años ochenta. Su cuadrante abombado, detalle vintage exquisito, color bordeos exquisito e inédito de su bisel o de sus agujas snowflakes han participado de la reputación de este modelo emblemático durante el periodo que vio nacer los primeros relojes de inmersión.

El modelo para submarinismo de 1956 fue la base de inspiración para este nuevo reloj Tudor del año 2012. Si miramos y apreciamos en detalle una parte pequeña del misterio propio a todo tesoro que aguarda en el fondo marino, el reloj Heritage  guarda también una buena cantidad de sus secretos. Comenzando por sus líneas inspiradas del modelo del año 1954, sus bordes afinados y alargados, trabajados y redimensionados para proponer una caja contemporánea de 41 milímetros de diámetro, estanco a 200 metros y con un cristal de zafiro abombado. Igualmente abombado el cuadrante negro arbóreo con generosos índices luminiscentes para una perfecta visibilidad. El oro rosa de las agujas sopla un aire de nostalgia, sugiriendo una oxidación característica de las piezas más ancianas. Original y exclusivo a Tudor, el color bordeos del bisel giratorio uni direccional, fiel a los modelos originales de los años setenta esta aquí tratado del más bello efecto.

Como detalle siempre característico de la firma de relojes Tudor, un mismo toque bordeos sobre la punta de inserción de la corona para remontar el mecanismo gravado con la rosa Tudor. Provisto con el nuevo cierre deployante desarrollado por Tudor, el reloj Tudor está provisto de dos tipos de brazaletes, uno en tejido negro y otro a elección del cliente sea en acero o en cuero envejecido exclusivo. Un toque de originalidad suplementaria para un reloj elegante y contemporáneo.