Alimentación Bio-compatible. Comer según nuestro modelo biológico
ALIMENTACIÓN BIO-COMPATIBLE
Comer según nuestro modelo biológico
Roxana Monsivais Borjón Zacatecas Zac. Febrero 2014
Nunca se ha preguntado por qué si nos alimentamos como nos han enseñado las instituciones de salud durante años y con el gran avance tecnológico que tenemos, las enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes, hipertensión, enfermedad de Alzheimer, osteoporosis, entre otras, siguen en aumento y al parecer estas cifras parecen no disminuir; pues resientes investigaciones han demostrado que al parecer no hemos estado haciendo las cosas correctamente.
Muchos investigadores han estado observando detenidamente la problemática mundial del incremento tan acelerado de diversas patologías como las antes mencionadas, además del cáncer, y se han planteado la misma pregunta, por lo que decidieron realizar un estudio más profundo. Sus hipótesis los han llevado a la realización de diversas investigaciones, algunas han comparado la alimentación actual con la de nuestros antepasados, otras han estudiado más detenidamente qué es lo que pasa en nuestro organismo cuando comemos tal o cual cosa, otras han ahondado en las cuestiones tradicionales y culturales de la alimentación, y muchas más han realizado trabajos de investigación relacionando el consumo de ciertos alimentos con algunas patologías; los resultados han sido sorprendentes.
Primero encontraron que nuestra alimentación no correspondía a nuestro modelo biológico, es decir, nuestro cuerpo está diseñado para comer cierto tipo de alimentos; los investigadores concluyeron esto después de analizar nuestro modelo biológico (anatomía, fisiología y genética) detalladamente, se dieron cuenta que nuestra alimentación debe de ser lo más semejante posible al de un primate, ya que al igual que ellos, nosotros también somos homínidos, por lo cual nuestro cuerpo tiene la capacidad de consumir preferentemente alimentos que encontremos en la ecosistema que nos rodea, tal y en su estado natural, como frutos, verduras, germinados, semillas oleaginosas (nueces, avellanas, cacahuates) y agua, y en menor cantidad cereales integrales, tubérculos y carnes blancas como el pescado y pollo. Es así como se acuña el concepto de alimentación bio-compatible. Muchos de los estudios realizados demostraron que en ciertas regiones del planeta que mantienen una alimentación similar a la descrita, la gente llegan a vivir hasta considerarse como longevos (más de 90 años) y lo más importante es que llegan a esta edad sin padecer enfermedades que los incapaciten, como es el caso de de la población de Okinawa una pequeña isla del medio oriente y de mucha de la población de los países del mediterráneo.
En segundo lugar los investigadores encontraron que estábamos comiendo mucho más de la cuenta, es decir, de cierta manera nuestro cuerpo está diseñado para comer lo más que se pueda, es un mecanismo de defensa con el que contamos todos innatamente, este mecanismo se desarrolló en tiempos en que los seres humanos no habían desarrollado la tecnología para producir de una manera tan acelerada los alimentos, en ciertas temporadas del año había suficiente alimento, por lo que había que comer mucho y así tener reservas de energía en forma de grasa corporal, y en las otras temporadas había escases de alimento, y era ahí en donde se agotaban nuestras reservas energéticas; además a esto hay que sumarle que frecuentemente comemos más de lo que nos corresponde por razones sociales, mercadológicas y emocionales. Debido a la globalización y al fácil acceso que tenemos actualmente a los alimentos durante todo el año, nuestro organismo ya no necesita de ingerir grandes cantidades de comida; al hacerlo, estamos sometiendo a nuestro cuerpo a un gran estrés al tener que digerir todos los alimentos, además de que si no realizamos actividad física constantemente, seguramente ganaremos peso, estos dos son factores predisponentes muy importantes para padecer enfermedades crónico-degenerativas.
Los estudiosos encontraron además que no estamos consumiendo suficiente agua ni alimentos ricos en fibra, y que por el contrario los alimentos que sí consumimos en gran cantidad (muy industrializados, carnes rojas, azúcares simples, etc.) nos provocan una acidificación del organismo, la cual se ha comprobado es el medio ideal para el desarrollo de la enfermedad.
Estos resultados han sido de tal impacto, que la reconocida Universidad de Harvard ha creado su propia guía alimentaria, muy semejante a la descrita en este texto.
En conclusión, para poder llevar una vida de mejor calidad y cantidad, necesitamos de los siguientes factores en nuestra vida diaria:
- Una alimentación bio-compatible
- Disminuir nuestra carga calórica
- Y no olvidar que es de suma importancia el estado mental y emocional.
Fuente García-Chacón R. (2011). El Código Alimentario. México.
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