ALGUNOS POSIBLES EFECTOS DE LOS BOMBILLOS LED EN LA SALUD.

Posiblemente como un buen consumidor has llevado a cabo algunas investigaciones sobre tu nueva inversión, los bombillos LED. O estás llevando a cabo una investigación exhaustiva acerca de lo que te conviene más al momento de reemplazar tus bombillos incandescentes y estás considerando los LED, como una buena opción. Pero en estas investigaciones, has encontrado algunas páginas que te advierten sobre posibles efectos negativos en tu salud de los LED¸ por lo que te sientes un poco inquieto. Te comprendemos y queremos ayudarte a solucionar estas inquietudes, por lo que te recomendamos que leas lo siguiente.

Aunque la luz en general es muy benéfica y casi inocua. Hay parámetros que pueden afectar nuestra salud tales como: la intensidad, el parpadeo y su espectro.

La intensidad de la luz tiene dos posibles efectos que son el calentamiento del ojo y el deslumbramiento. Con la tecnología de los bombillos led NO existe calentamiento del ojo. Y en la parte de deslumbramientos, los especialistas coinciden en que los niveles de intensidad por regla general no son dañino, con la excepción de que nos expongamos directamente a la luz de los bombillos LED, así que trata de evitar lámparas muy potentes con LEDs expuestos.

El parpadeo de la luz, dependiendo de su frecuencia puede producir ataques epilépticos, en un rango de 3 a 70 Hz y si esa frecuencia alcanza los 165 Hz existe el riesgo de dolores de cabeza, alteraciones de visión y malestar. Sin embargo, estos efectos dependen de la sensibilidad de las personas, así como de otros parámetros como la frecuencia, la intensidad de la luz (a mayor intensidad mayor efecto), el color de la luz (azul y rojo son los que pueden generar mayores afecciones) y la modulación. La mayoría de los bombillos LED, presentan frecuencias superiores a 200 Hz, que no tiene efecto en las personas, ya que como mencionamos, los daños se pueden presentar cuando existe una frecuencia muy baja. Por lo que con buscar bombillos LED que funcionen con frecuencia mayor a 200 Hz, las posibles afectaciones a tu salud son mínimas.

El espectro de luz, es decir su composición en colores, afecta nuestro ciclo circadiano o sea, nuestra actividad del día. Por el día la luz tiene un mayor componente azul y por la noche la dosis de rojo es más elevada. Como lo mencionamos anteriormente en los diodos emisores de LED, se pueden usar tres LEDs de colores diferentes rojo, verde y azul, los que determinan el calor de la luz. Y en el caso de que se use una bombilla LED con un componente azul muy intenso, pueden existir algunos daños en los tejidos oculares y afectar la producción de melatonina, una hormona que puede afectar nuestro ciclo circadiano y producir insomnio, fatiga, estrés y algunos otros problemas. Sin embargo, como lo dijimos debe ser una fuente de luz azul MUY intensa, por lo que puedes buscar bombillas que generen muy poca luz azul.

O en el caso de que estés expuesto a luces intensas con un componente azul abundante, se debe trabajar con gafas protectoras. Si tienes hipersensibilidad no te expongas a las luces frías y mejor opta por la luz blanca cálida y por último, pero no menos importante trata de evitar el uso de luces blancas frías tres horas antes de irte a dormir.

Como verás, los efectos no son muchos y si haces uso de la tecnología de los bombillos LED de manera inteligente y responsable, son más benéficos que perjudiciales.