Cómo cerrar una nota

El cierre de una nota es uno de los aspectos que más contribuirán a dejar bien en claro el propósito de la misma, y el mensaje general que se quiere dar. Cuando una nota está bien cerrada, el lector tendrá en claro qué es lo que se quiso decir, a dónde apuntaba el autor, y cuáles son las conclusiones que pueden extraerse después de haber sacrificado preciosos minutos leyéndola. En definitiva, el cierre refuerza el mensaje y deja al lector con la sensación de haber leído algo provechoso.

Para cerrar una nota basta un párrafo. No es necesario que sea demasiado extenso, con cuatro o cinco oraciones deberá ser más que suficiente para darle al artículo un buen cierre. Todo párrafo final debe contener la siguiente información:

Reformular la pregunta o propósito del artículo

En concreto, estos son los pasos a seguir para…

Teniendo en claro cómo proceder, alcanzar/lograr…[el objetivo buscado]… no debería ofrecer mayores complicaciones…

No es difícil [hacer x cosa/lograr x objetivo]… simplemente teniendo en mente los pasos mencionados…

Enunciar una conclusión clara. Esto son algunos conectores que nos ayudarán a introducirla claramente

En conclusión…

En definitiva…

En consecuencia…

De todo lo dicho surge que…

Un cierre elegante, que a la vez deje claro desde qué punto de vista se redactó el artículo. Por lo general es esta oración final la que más dificultades trae. El humor sutil puede ser una buena salida

Demasiado para el primer día. Seguiremos con nuestro plan estratégico para hacer negocios en Twitter en la próxima nota. Ahora tómese una chocolatada con unos polvorones, y regálese un buen momento.

Estas herramientas, bien empleadas son como una navaja Víctor Inox en las manos de Robinson Crusoe: pueden hacer maravillas por usted, sus productos y su web.

Otra variación de cierre es dejar planteada una pregunta retórica, para facilitar al lector que saque sus propias conclusiones

La idea es participar, pero cómo lo hacemos puede marcar una gran diferencia en la capacidad de nuestros potenciales clientes de encontrarnos.

Demasiadas preguntas por ahora, habrá que ver cómo se comportan los anunciantes, y esperar las primeras “historias de éxito” para saber si es una opción viable.

Un buen párrafo de cierre debe resumir en parte el contenido de la nota. Quien lo lee debe poder entender, sin leer el resto, de qué hablamos, y a qué conclusiones llegamos. Es cierto que algunas notas no buscan crear opinión, ni hacer ningún tipo de análisis, y quizás su único objetivo sea reflejar un hecho de la realidad, como si se tratara de una nota periodística. Una nota periodística bien confeccionada, en un sentido purista, no busca llevar a la reflexión al lector, ni verter la opinión de la redacción, al menos no abiertamente. Simplemente busca mostrar hechos de la realidad. Qué forma la agenda, cuáles temas son incluidos o no en un medio masivo de comunicación, ya forma opinión por si mismo. La elección de ciertas notas sobre otras ya implica una valoración, un juicio por parte de quien se encarga de ese medio. Pero esto ya es harina de otro costal. Baste decir que las notas periodísticas informativas no llevan conclusión por lo general, sino un simple párrafo lógico de cierre.

Un ejercicio que puede resultar de utilidad es revisar los artículos de otros autores, leerlos con ojos analíticos, y tratar de “desagregar” la manera en la que el autor organizó lógicamente su posteo. Este ejercicio puede ser de gran utilidad, y nos brindará parámetros claros acerca de las estructuras más efectivas, y cómo emplearlas adecuadamente.