Un toque de violencia para la delincuencia
La familia es la unidad fundamental sobre la cual está constituida la sociedad y una de sus funciones principales es la creación de un ambiente armonioso que brinde apoyo y seguridad a sus integrantes.Un estudio reciente que se llevo a cabo en el Estado de México con profesionales que se dedican al desarrollo de niños que han sufrido maltrato físico y psicológico, así como con los padres de familia que han maltratado; arrojaron resultados que revelan que los niños con que han sufrido algún tipo de violencia pudieran ser mas propensos a delinquir ya que la influencia directa de violencia que reciben en sus hogares se ve reflejada en su comportamiento agresivo que tienen con los demás.Este mismo estudio refleja que la falta de dinero en los hogares, es uno de los elementos por lo que los padres se sientan estresados, y los lleva a agredir a sus hijos. En la actualidad se comprueba que hay un cierto abandono hacia los hijos dejándolos solos, que se vincula con la necesidad de salir a trabajar por parte de ambos padres, refiriéndose que el sector mas vulnerable para que se manifieste la violencia es el sector bajo según los estudios realizados.Como sociedad nos hemos preocupado por crear más centros de readaptación social ya que el número de personas que ingresan ha ido en aumento, sin embargo nos hemos olvidado de algo fundamental los valores, que se deben de inculcar en casa, de acuerdo con este estudio refleja que un niño no debe ser castigado por cometer un delito y consideran que una de las medidas para reducir la delincuencia seria darles protección, y amor. Estos resultados nos alertan de la fuerte preocupación que hay en la sociedad acerca de este problema tan grave que es la delincuencia, desgraciadamente día con día es mas frecuente sobre todo en los niños y adolescentes, los padres de familia, la escuela y la sociedad misma tienen una gran responsabilidad para combatir este problema, y no dejar que los niños se conviertan en seres delincuentes.
Por: Ana Rosa Monroy
Wendy F. Sanches Figueroa
A.R.M.G
Su artículo me parace bien, pero insuficiente, por eso lo he calificdo de regular.
Que en la familia el joven debe encontrar mucha comprensión y amor eso está muy bien, pero los padres de hoy en día que tienen treinta y pocos años con hijos adolescentes , perdone, pero en su mayoría carecen de aptitudes para educarlos debidamente porque ellos tampoco lo han sido. Si los chicos no reciben una formación religiosa, no hay autoridad en la familia ni disciplina en la escuela, ni tampoco se piensa para nada en cambiar la programación del cine y la televisión con respecto al sexo y la violencia, es materialmente imposible
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