Las Julietas de hoy ya tienen quien las perfume

La línea de perfumería selectiva Juliette Has a Gun (“Julieta tiene un arma”) surgió en el año 2005, como un proyecto personal de Romano Ricci, bisnieto de la legendaria Nina Ricci. ¿Su objetivo? Crear 5 fragancias diferentes pero todas basadas en el perfume de las rosas. Según Ricci, la rosa es el símbolo perfecto del romanticismo, y sigue siendo, en su sencillez, el más bello regalo que un hombre puede entregar a su amada. De esta idea surge también el inusual nombre de la firma, con sus ecos shakespeareanos: las “Julietas” de hoy han cambiado radicalmente y van armadas por la vida, pero siguen siendo tan románticas como aquella primera imaginada por el gran autor inglés.

La promesa inicial de Ricci, sin embargo, no se ha cumplido: Juliette Has a Gun lleva ya lanzadas al mercado seis fragancias, por más que la más reciente haya sido bautizada Not a Perfume (“no es un perfume”).  La primera colección de la firma, en la que el concepto de tragedia shakespeareana aparece con más fuerza, data del año 2006 y se compone de dos fragancias: Miss Charming y Lady Vengeance. Ambas creadas por  Romano Ricci junto al reconocido perfumista Francis Kurkdjian, la primera presenta un corazón de rosa marroquí acompañado de acentos de frutilla y litchi. La segunda, menos frutal, se rinde al encanto de la rosa italiana y la viste de vainilla y patchouli. El slogan de la colección advierte: “el romance se encuentra con el rock”.

El éxito de estos dos primeros perfumes determinó la llegada en 2008 de un tercer integrante de la línea, el chipre Citizen Queen, en el que la rosa cede protagonismo ante la fuerza de los aldehídos y de un sugerente toque animal.

2009 marcó para Juliette Has a Gun el nacimiento de la primera fragancia que deja de lado las notas de rosa, Calamity J (por Jane o por Juliette) y sorprende con una composición verde con notas de musk casi masculina. Según el propio Ricci, se trata de un homenaje a las mujeres fuertes que ocupan hoy roles determinantes dentro de la sociedad. Ese mismo año, Midnight Oud significó la vuelta de la rosa a las composiciones de la firma, en una celebrada combinación de rosa marroquí y acentos ambarinos.

Pero es el nuevo y travieso lanzamiento de la firma, Not a Perfume, el destinado a acaparar la atención de los amantes de los perfumes de lujo durante este año. Presentado como unisex, el misterioso elixir, dicen, no se parece a ninguno de los anteriores perfumes de la firma.

Ni a ningún otro, una cualidad cada vez más difícil de encontrar en el mercado de perfumes y cosméticos.