Ante todo la humanidad
Mi simple y modesto comentario con relación a los mineros rescatados en Chile es el siguiente: Para mí este acontecimiento – más allá de que si lo hicieron los chilenos, u otro país - es el vivo reflejo de lo que puede hacer la especie humana cuando se ve en situaciones de este tipo. Es la humanidad la que ha triunfado, y no un pueblo específico. Creo que en cualquier País del mundo se hubiera reaccionado de la misma manera. Y si hubiera sido un país con pocos recursos materiales y tecnológicos, los hubieran ayudado los que poseen estos recursos. La unidad en la humanidad se hace presente en estas circunstancias.
El presidente Piñera, dijo que Chile ha aprendido con esta experiencia, que con la unidad se pueden hacer muchas cosas. Pero creo que esto va más allá. La especie humana (diría yo) es la que lucha, cuando se ve amenazada, por su mismo instinto de supervivencia. Y sin pretender ser un poco fantasioso, diría yo: tendría que pasar algo muy, pero muy fantástico, para que la humanidad pierda ese sentido de individualismos territoriales.
Creo y vuelvo a repetir – sin pecar de fantasioso – Si la humanidad se viera amenazada en su totalidad por una intervención de orden extraterrestre, todos los países del mundo tendrían que unirse para luchar contra esto. Se vendría abajo todo tipo de divisiones territoriales, y todos seriamos uno. “Como en la películas de ciencia ficción”
Pero sin necesidad de irnos a los temas fantásticos, no muy lejos está la realidad de la contaminación ambiental. Tendría que ocurrir un desastre ambiental, para que la humanidad, - ojala no tarde – se una para superar este acontecimiento.
Cambiando de tema. Hoy día he podido apreciar algunos comentarios en el diario “El Comercio” sobre la salida de Jaime Bayly de la Televisión (por el momento) algunos dices: “Que bien”, otros dicen, que como ya acabó la campaña electoral, ya no es rentable tenerlo en la televisión. Otros dicen: “que pena”, otros dicen: “no tenia pelos en la lengua” aj que asco, no me imagino tener pelos en la lengua.
En lo particular, a mi me caía bien el tipo. (A pesar de que un amigo me dijo que no se puede estar con Dios y con el Diablo) pero no es que esté con él. Cuando comentaba sobre sus programas, siempre he tratado de decir en todo lo que no estaba de acuerdo con él. Pero los escenarios son diferentes, unos tienen más audiencia que otros. Y allí está el peligro.
Cuando Jaime atacaba a la Iglesia Católica, tenía todo el derecho de hacerlo, como yo también tengo todo el derecho de no estar de acuerdo con él. Pero como repito “los escenarios son diferentes”. Y lo que hay que reconocer, es que gracias a Dios, ese escenario ya no existe. Pobrecito, pero como dije: “me caía bien el tipo” Ahora solo me queda ver a Rosa María Palacios.
Andrés Arbulú Martínez
Registro automático