Sistemas efectivos para jugar a la ruleta: aplicando la ley del tercio

Matemática y ruleta tienen una larga historia de amores y desencuentros. En el origen mismo de este juego encontramos una fallida voluntad de probar una hipótesis matemática. Podríamos decir que, a partir de allí, la ruleta se complace una y otra vez en hacer fracasar hipótesis matemáticas, por sólidas que parezcan. Sin embargo, algunos sistemas para jugar a la ruleta parecen estar bien encaminados en la titánica tarea de conseguir que este rebelde cilindro numerado obedezca las leyes universales de la ciencia matemática. Veamos el siguiente ejemplo:

El sistema Roul2 parte de un deseo ya manifestado anteriormente: el de lograr la sistematización del caos. Numerosos científicos han estudiado millones de tiradas de ruleta con la esperanza de encontrar en ellas patrones que permitan realizar predicciones certeras y elaborar leyes definitivas. Pero el comportamiento de la ruleta ha hecho fracasar estos intentos una y otra vez. A diferencia del Black Jack, del que sí se ha podido extraer un patrón de comportamiento que desembocó en la creación de un método verdaderamente infalible para ganar continuamente (el método de contar las cartas, prohibido, por supuesto, en todos los casinos del planeta), la ruleta continúa mostrándose indescifrable y caprichosa. La ruleta permanece, al menos hasta hoy, como la expresión más perfecta de ese elusivo concepto que es el del azar. Ningún método para jugar a la ruleta ha conseguido probarse, hasta hoy, como infalible.

El mencionado método Roul2 es uno de los que mayor provecho consigue sacar de la ayuda de la ciencia matemática. Su mecánica se basa en la premisa fundamental de la ley del tercio. La ley del tercio observa que, si realizamos 37 tiradas de ruleta, comprobaremos una y otra vez que los números que salen completan sólo 2/3 del total del cilindro. El 1/3 restante permanece tercamente ausente. A partir de esta información es posible establecer una media de salida de cada número del cilindro, estableciendo progresiones matemáticas que nos permitirán calcular las chances de repetición de cada número en las tiradas, según hayan salido 1, 2, 3 ó más veces.

Este sistema resulta un excelente parámetro de referencia para fijar un límite de juego, ya que permite calcular cuántas tiradas podremos apostar a un determinado número con una esperanza matemática positiva. Por último, para evitar sorpresas desagradables, conviene tener en cuenta que este sistema para jugar a la ruleta sólo funciona para apuestas a números individuales.