Uno no tiene que ir a restaurantes caros para disfrutar de una buena copa de vino y no tienes que comprar la botella de vino más caro para poder comer deliciosamente. Un buen palto de comida siempre se disfruta mejor con un vino, pero el saberlos combinar podría ser un arte para algunos.
Las reglas de combinación entre el vino y la comida vienen dictadas por los chefs franceses del siglo XIX que viajaban alrededor del mundo mostrando su buena cocina. Las reglas eran básicas: vino blanco con pescados y mariscos, vino tinto con carnes rojas y la champán con las otras. Sin embargo, estas reglas no se siguen al pie de la letra, pues la gran variedad de vinos ahora existentes permiten hacer muy buenas combinaciones con la comida y disfrutar de un banquete espectacular.
Aquí te presento algunos de los consejos que se dan a la hora de combinar el vino con la comida, con el fin de que lo disfrutes al máximo:
-Al momento de disfrutar un postre acompáñalo con un vino dulce, si tomas un vino seco te dejará un sabor amargo
-trata de equilibrar el sabor entre la comida y el vino, por ejemplo si se va a comer un platillo pesado, disfrútelo con un vino igualmente fuerte como el tinto o vinos blancos de gran sabor
-los vinos de alto grados de acides se disfrutan más con platillos con grandes cantidades de grasa, las grasas contrarrestan el impacto de lo ácido del vino
-vinso altos en tanino se toman con platillos con muchas proteínas, pues éstas se combinan con lso taninos y disminuyen sus sabor
Lo dicho anteriormente son recomendaciones, al momento de seguirlas disfrutarás la combinación, pero te recomendamos que no te encasilles con ciertos vinos y ciertos platillos, existe una amplia gama de variedades del vino que debes de descubrir por ti mismo y aprender a combinarlos es un trabajo fuerte, pero siempre disfrutarás de hacerlo.
