¿Quién Puede Creerse Eso?

Ayer fui a recoger a una tía para llevarla a una consulta médica. En la televisión estaba uno de los famosos “talk shows” donde enfrentaban a distintas personas en diversas situaciones.

Mientras transcurría el tiempo y salían historias cada vez más patéticas (y absurdas), no pude evitar pensar en lo reales que son y en cómo existen situaciones realmente extrañas.

Por cierto, no nací ayer… sé que los “reality shows” y “talk shows” son mas show que otra cosa, pero la cosa es que he visto muchas de estas cosas con personas reales en situaciones reales.

En serio, ¿quién puede creerse la historia del tipo al que “le robaron” todo el dinero de la quincena, cuando llega tres días después y destilando alcohol?

O la de la chica que no llegó a dormir a su casa porque “se quedó cuidando a una amiga que estaba muy triste”… que luego aparece en todas las fotos de la fiesta de x.

He visto que solamente un padre o alguien enamorado. Aceptémoslo, cuando estamos en ese estado simplemente creemos lo que sea.

Mientras todos los demás giran los ojos, se tapan la boca para reírse o hacen comentarios sarcásticos, a nosotros nos brillan los ojos al saber la razón, totalmente creíble (Ajá...), del novio que llegó con lápiz labial en el cuello y de la chica que perdió el dinero de la renta pero que llega con aretes nuevos que “se encontró tirados ¿Tú crees?”

Sí, yo también caí en algunas de estas cosas y, mirándolo en retrospectiva, debí realmente estar loco para creer semejantes cosas.

Me consuela un poco saber que todos somos iguales. Una generación tras otra seguirá creyendo las mismas historias increíbles mientras los demás se ríen.

Mientras nos hacemos un poco más cínicos e inteligente, la juventud llega con la frescura e ingenuidad que alguna vez tuvimos y nos dicen indignados que no hablemos mal de su novio(a) porque “¡ustedes no la conocen como yo!”.

Bueno, supongo que es parte de este mundo. Así como dejamos la estafeta para que las nuevas generaciones tengan empleos, estudios y rompan los records olímpicos, también veremos que, en creer cosas increíbles, parece que nos siguen el ejemplo.

De todos modos, que bonito es el amor y también las parejas. Conseguir la pareja adecuada puede tomar tiempo pero casi siempre llega.

Mientras no pierdas el tiempo con quién no lo merece… que por cierto puedes detectar por las historias increíbles. Un poco más de cinismo no te hace más inteligente pero tal vez te ayude a ver cuando no debas creer todo lo que escuchas.

Claro que están los que creen ciegamente en el amor y que promueven la confianza absoluta que lleva a la ingenua pareja a gritar convencida: “¡Por supuesto que no es él el de la foto besándose con esa chica! ¡El estaba en la iglesia! No me contestó el celular porque no lo permiten en el templo…”

En fin, somos humanos. Aprendemos a hablar, escribir, mandar mensajes de texto y creer cosas extravagantes. Y algunas de esas personas dicen que “¿cómo alguien puede creer en los OVNIS?”

¿Tú crees?

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