Un nuevo colector de energía solar que trabaja hasta de noche

A medida que el precio del petróleo sigue subiendo, las nuevas tecnologías de recolección de energía solar se están desarrollando, y cada vez son más atractivas. Una de las últimas innovaciones, revelado recientemente por el Laboratorio Nacional de Idaho, es una variedad mejorada de colector solar, tan eficaz, que incluso puede trabajar de noche.

La clave de todo está en la nanotecnología. Con esta nueva tecnología, millones de aros muy pequeños de metal se moldean como "microantennas", que se puede colocar en casi cualquier material, incluyendo las hojas de plástico.

Estas "microantennas"  en forma de espiral son alrededor de 1 / 25 del ancho de un cabello humano. Son tan pequeñas que resuenan en la interacción con los rayos infrarrojos del sol. Esta resonancia se puede traducir en energía. Durante el día, la Tierra absorbe una gran cantidad de esta energía infrarroja, que se irradia por la noche, lo que permite a estas microantennas recoger la energía solar incluso después de la puesta del sol.

El panel solar convencional puede convertir alrededor del 20% de los rayos infrarrojos en electricidad. El equipo de investigación detrás de esta nueva tecnología, cree que puede alcanzar una eficiencia de alrededor del 80%. Además, los paneles solares convencionales son caros de producir, porque se apoyan en el silicio de alto grado, que se está volviendo cada vez más caros.

Estos nuevos colectores solares se pueden fabricar por mucho menos, es más, el equipo de investigación tiene como objetivo crear nanoantenas tan barato como les sea posible, para poder apoyar sistemas de seguridad online, sotener la energía de una empresa de consultoría informática y ofrecer los servicios necesarios en electricidad para un hogar o empresa.

Pero todo no está listo todavía. Un gran obstáculo sigue existiendo. Aunque estos colectores solares son capaces de recoger la energía solar, actualmente no pueden transmitir esta energía solar en electricidad utilizable.

Los rayos infrarrojos solares golpean las nanoantenas y generan una corriente que tiene una frecuencia que oscila diez mil millones de veces por segundo, que es más grande que una oscilación normal de los electrodomésticos existentes.

Sin embargo, el equipo de investigación trabaja en ello. En este momento, estas antenas son buenas en la captura de energía solar, pero no son muy buenas en su conversión, pero existe una muy prometedora investigación exploratoria en curso.