Más idiomas para dirigir mejor

Gestionar bien una empresa no obedece sólo al hecho de cursaruna carrera universitaria en Administración y Dirección de Empresas. Tampoco garantiza nadaestar en posesión de masters Mba y tener el respaldo deotros cargos directivos.

A parte delos títulos universitariosesvital que el aspirantetengahabilidadesde gestión, es decir, un conocimiento profundo de la marca, aptitudes para saber elegir, aguantar el estrés y habilidades comunicativas para ser capaz de dirigirse de forma correcta a los empleados. El ejecutivodebe tener unos nervios de acero y no arrugarse ante cualquier tipo de infortunio. Por este motivo, es un cargono adecuado para personalidades débiles.

Tan primordial como las carreras universitarias y las aptitudesdirectivas es el dominio de idiomas. Hace un par de décadas, conocer varias lenguas no se considerabasustancialsi se pretendía capitanear una compañía pero hoy en día, con el cruce de fronteras, resulta imprescindible. Los empresarios que estaban en el cargocon anterioridad a queasomaraeste requisito han tenido que llevar a cabo un granprocedimiento de aprendizaje.

El idioma más importante es el inglés, aunque parece ser que el chino se presenta como el idioma del futuro. De todas formas, aprender un idioma precisa demucho afán y calma. Es necesariovalorar que a medida que nos hacemos adultostenemos más obstáculos para incorporarotros idiomas, a diferencia de los niños, que incorporan nuevos lenguajes como si fueran políglotas. Tambiénes muy beneficiosoir a un país donde la lengua que queremos aprender sea el idioma vehicular, principalmentesi la escuela de idiomascuenta con un curso lingüístico especializado en negocios.

En caso de serespecialmenteinútil para los idiomas siempre hay la opción de delegarlos cometidos que precisentrato con el extranjero a otro personal de la empresa. A pesar de que es beneficioso no responsabilizarse delos proyectos, el hecho de no poder comunicarse con los compradores, colaboradores o socios en un momento determinado puede traer graves consecuencias. Justamente por eso, es vital que los candidatos a directores se preparendebidamente.