Según informó el Instituto Mexicano del Seguro Social a través de su Delegación Chihuahua, los excesos en la comida incrementan el acido úrico en la sangre, el cual se acumula en las diversas articulaciones del organismo pero primordialmente, en el dedo gordo del pie. A esta enfermedad se le conoce como “gota” ó hiperuricemia. Algunos casos de hiperuricemia se deben al exceso en la ingesta de carnes rojas, mariscos, y bebidas alcohólicas pero en su mayoría, la enfermedad surge a partir de una alteración congénita del metabolismo. Ante esto, la única medida de auto prevención es la disminución en el consumo de los productos ya mencionados, más aún cuando se tienen antecedentes familiares de esta enfermedad.
La urea corresponde a un desecho del metabolismo, específicamente de aquellas purinas que se reproducen de forma natural en nuestro organismo. Estas se obtienen a través de la alimentación, y en los casos en los que los niveles están por arriba de 7 miligramos por decilitro, se dice que se padece de hiperuricemia.
Entre las articulaciones que se ven afectadas por esta enfermedad, encontramos las articulaciones en las rodillas, el codo y la muñeca, ya que son las zonas en que se depositan los cristales del ácido úrico, manifestando un daño articular que se expresa con un intenso dolor, enrojecimiento e hinchazón de la respectiva articulación.
A. Verástegui
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