Violencia psicológica instalada. Romper relaciones destructivas

“Quedé embarazada a los 24 años, me casé porque quería formar una familia como “tendría que ser”, pues mi ahora ex marido, no quería pero igual accedió. En menos de un año , antes y después de nacer mi hija, comenzaron los maltratos. El empezó a dedicarse a la vagancia, faltar al trabajo, merodear por ahí con amigos, y llegar a casa como si nada. A todo esto yo trabajaba 10 horas en una oficina y llegaba a casa a hacer compras , limpiar, cocinar etc etc. También y muy grave fue que empezó a llevarse la plata de mi sueldo con la que pagábamos todo, ya que El no aportaba nada, y no me alcanza casi para vivir. Llegaron las discusiones por la plata, la falta de interés en el embarazo y luego en su beba chiquita, la nula ayuda en casa a pesar que yo trabajaba y estaba pagando todo. etc. Insultos, violencia, golpes llegaron a mi vida y en consecuencia también la de nuestra hija. El seguía sin cambiar ni trataba de hacerlo. Le insistí muchas veces en hacer terapia de pareja, pero El no quería…yo seguía atrapada en ese circulo vicioso de peleas y arreglos – acción y reacción – …la única salida, a veces, era la ruptura…pero no la quería ver, quería intentar salvar la familia, sin embargo El estaba en control….”

Tú que estás en continuo maltrato psicológico, emocional, girando en círculos dentro de esta violencia que tu pareja ejerce, te sientes sometida, manipulada, y con una especie de “confusión mental” donde casi no te reconoces, tu autoestima está ausente y sientes que no puedes decidir nada. Ahora te digo Despierta!!! si es que quieres salir realmente de este círculo de violencia, si dentro de tu ser puedes sentir esa fuerza que yace muy profundo dormida dentro de Tí.Tú puedes salir de la violencia emocional y psicológica, por supuesto que siempre será mejor y más rápido tomada desde el inicio, ante los primeros maltratos o indicios de maltrato.

Ahora bien, como dicho anteriormente, ” si es que quieres salir realmente de este círculo de violencia…” porque hemos escuchado reiteradas veces decir “Ella no quiere salir de ahí, Ella está cómoda a pesar de que la maltrata…”, pues la lógica razón nos dice que esto es “enfermo” y que no podemos tolerar el maltrato, la dominación por parte del otro;  sin embargo hay casos de mujeres que se quedan ahí…y sí! por más que nos parezca extraño..pasa en muchos casos. Esta zona de violencia se transforma con los años en “zona de comodidad” como algo natural para la vida de esta mujer, entonces esta rara naturalización la paraliza en este lugar de maltratos por años…, y quizás pasen 10, 15 o 20 años recibiendo violencia , menosprecios, manejo, etc. de parte de sus esposos o parejas.

Esta realidad, que se da en cientos de casos (en donde muchas veces la mujer se va y vuelve al tiempo con su maltratador) por lo general , en la mayoría de los casos, está ligada con mujeres que han sido víctimas de violencia, abandono y abuso infantil en alguna manera en su niñez. Si te sientes identificada con esto, te pido que “te muevas” despierta!! , tienes que salir de triste forma de vivir, en este tu presente, no es necesario que revivas experiencias que te dolieron en la infancia, ya basta!! comienza a actuar!!Una vez que sales del círculo de la violencia tendrás que recuperar todas las pérdidas emocionales, psicológicas y físicas causa de la convivencia en violencia.

Vemos que sólo el 5% de casos de violencia familiar son denunciados, es decir sólo se denuncia el maltrato cuando es brutal o muy reiterado, por que?? , Bien existen condicionamientos importantes ( y la mayoría causa de violencia en la niñez vivida en la mujer ), por los que no se denuncia el maltrato:

La dependencia económica y afectiva de la víctima con el agresor.El miedo.La no aceptación del fracaso matrimonial o de pareja, queriendo sostener la relación hasta límites insoportables.La falta de conciencia de estar siendo maltratada (solo se debe denunciar cuando hay lesión).El sentimiento de culpa a la hora de denunciar el padre de sus hijos.El desánimo al ser conscientes de que no va a servir para nada.Falta de recursos económicos.No tener donde ir, etc.La falta de respuesta de la propia familia de la víctima y de las Instituciones en general.El ocultamiento del problema por vergüenza.La baja autoestima de la víctima que impide dar respuesta a la agresión.La tolerancia del maltrato por parte de la mujer.

La violencia familiar se produce en todas las clases sociales y en todos las clases económicas, incluso en aquellos de alto nivel cultural. No obstante cuando se conocen datos de denuncias, encontramos principalmente mujeres de clases sociales pobres.

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Muchas mujeres retiran la denuncia antes del Juicio, casi siempre por miedo y bajo amenazas. Un factor que hay que tener también presente es la dificultad que tiene la víctima de probar los hechos, estos siempre se producen en la intimidad, sin testigos o con testigos que dependen del agresor por razones de parentesco. Tampoco le resulta fácil a la víctima llevar testigos de la agresión tales como vecinos, ya que normalmente no quieren ir. Por otra parte, los certificados de lesiones aportados no siempre tienen el poder probatorio de la existencia de la violencia familiar, ya que si bien certifican las lesiones, no acreditan quien las produce. En definitiva en la mayoría de los casos las mujeres que se animan a denunciar, viven con miedo y se sienten perseguidas por su agresor, no se sientes protegidas por la justicia, ya que hay muchos casos fatales donde el ex vuelve y llega a asesinar a su mujer.

Que pasa entonces? La mujer evalúa estas dificultades ante una posible ruptura:

Riesgo de buscar ayuda o decidirse, la violencia física y el daño psicológico:riesgo de un aumento de amenazas y de la violencia física (hijos, familia, víctima), de que el agresor amenace con suicidarse, de hostigamiento continuo, de secuestro de los hijos, etc…Riesgo económico: no tener poder adquisitivo, de perder ingresos o trabajo o relaciones, miedo a sentirse sola (el agresor la ha separado de sus amistades y familiares poco a poco, en algunos casos), etc…Miedo de las actitudes de los amigos, familiares, profesionales, ...: Riesgo de no ser creída, de que tengan una actitud crítica con ella, etc…

Si la mujer decide la ruptura, existen tres tipos de ruptura:Ruptura rápida: La mujer se va en cuanto aparecen las primeras manifestaciones de violencia.Tiene el grado de estudios necesario para encontrar un trabajo.Tiene amigos con los que contar.No tiene pasado familiar de violencia.Tiene alternativas, conoce recursos y tiene acceso a ellos.Tiene una buena autoestima.

Ruptura a disgustos: Se separa tras varios años de soportar violencia, después de haber intentado salvar la relación. Reduce su culpabilidad puesto que ha hecho todo lo que ella pensaba que podía salvar su pareja.Ha puesto medios para poner fin a la violencia.Ha buscado ayuda: psiquiátrica, alcohólicos anónimos, etc…Ha intentado salvar su matrimonio.Su decisión ha sido pensada y meditada.Evalúa que el precio del abuso es demasiado alto para ella y los niños, y decide irse.

Ruptura evolutiva: Abandona la relación y vuelve sucesivas veces, hasta adquirir el convencimiento de que es preferible afrontarlos problemas derivados de la separación que soportar la tortura de semejante relación. La violencia se añade a la dificultad de irse.Tiene baja autoestimaNo conoce los recursos.Tiene dificultades económicas.Tiene pocas posibilidades de trabajar fuera de casa.Comulga con los estereotipos femeninos (muy arreglada, conforme le gusta al hombre).Tiene la responsabilidad de los hijos , tiene miedo a la soledad.Se siente aislada.Aquí el maltratador se siente con autoridad para reiniciar, en algún momento, comportamientos violentos puesto que sabe que la mujer vuelve con El.

Muchas mujeres viven en relaciones destructivas, ya que desde niñas en las familias han visto repetidamente el abuso, y llegan a ver como “normal” o como parte de la vida el abuso. Quiere decir que ya están acostumbradas a este patrón y por lo tanto les parece un ejemplo para seguir en la vida o imitar aun de manera inconsciente.

Estos comportamientos son más fuertes en las mujeres porque así es la enseñanza lamentablemente. A la mujer se le educa para hacerse responsables por sus relaciones de pareja, lo que significa en muchos casos aguantar lo que sea, hasta abusos físicos, en lugar de liberarse de ese sentimiento de culpa y reconocer que deben aspirar a relaciones sanas y mejores.

Las relaciones destructivas activan patrones de dependencia muy parecidos a las adicciones y eso hace todavía más difícil el manejo de la salud física, emocional y psicológica , y a pesar de que la mujer se da cuenta que está mal no logra dejar la relación y siempre encuentra una justificación, aunque sea absurda, para seguir en esta relación o para quererla mantener.

Asimismo en estas relaciones destructivas, el agresor tiene cambios continuos de comportamiento. Es decir, hay momentos en que se arrepiente de los maltratos, pide disculpas y se muestra afectuoso, haciéndole creer a su pareja que todo puede cambiar. Aquí la mujer dependiente de la relación no ve o no quiere ver la realidad, y se aferra a esos momentos de esperanzas del supuesto cambio y sigue aguantando abusos. La realidad es que , en estos casos de violencia “instalada” desde hace tiempo, la mayoría de las veces el agresor no cambia y continúa en este círculo agresivo, por lo cual hay que decidir una ruptura.

Entonces piensa:  Tú tienes que elegir cómo quieres vivir, si no lo haces el otro elegirá por tí.  Decide cómo quieres vivir!!!   Despierta para salir del círculo de la violencia!!!:

No te tengas lástima.  No te heches culpas por cosas que hiciste o no hiciste, tampoco permitas que venga otra persona a acusarte o traerte recuerdos de errores o fracasos.  Tu puedes cambiar tu vida!!! No te dejes llevar sólo por sentimientos negativos.  Gritate a ti mismo BASTA! Ignora los pensamientos negativos, identifica los pensamientos que te limitan. Aprende a decir NO.   Tienes que ir poco a poco( mas cuando la violencia ya está instalada)   Dilo con naturalidad  y tranquilamente.  No tienes obligación de hacer algo que te lastime, que te dañe física o mentalmente , o estar con alguien que te maltrate.

Aplica estos principios, que quizás te cuesten al principio, ya que al estar tan arraigado el maltrato, la violencia, es un trabajo constante que hay que hacer para salir de este letargo…, es un trabajo conciente, de tomar conciencia para entrar en el camino del cambio, lograr una vida libre de violencia y recuperar tu autoestima.

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