Las Playas de Mallorca

Un paraíso de arenas blancas

Aguas cristalinas y arena fina de un blanco casi enceguecedor dan vida a las playas del Puerto de Alcudia, unas de las más concurridas de Mallorca. Será una verdadera delicia pasear por sus más de siete kilómetros de arena sabiendo que por allí mismo pasaban en otros tiempos romanos y piratas. Obviamente, hoy el ambiente ha cambiado bastante: chiringuitos, toboganes, duchas y catamaranes se alternan para demostrar que esta es una de las playas con más servicios de la isla. No obstante, si se avanza un poco más allá de la Ciudad Blanca se puede encontrar un ambiente menos concurrido y más salvaje. Aprovecha las ofertas de viajes a Mallorca que tienes a tu alcance para visitar la isla.

Al norte de la isla se encuentra una de las playas más idílicas: Formentor, destino de los famosos que desean pasar unas vacaciones tranquilas y telón de fondo de varios filmes. Larga y estrecha, su arena blanca se extiende como una extensa lengua bañada por elMediterráneo. Este es el punto de partida perfecto para iniciar un recorrido a bordo de una barca por la costa de Pollença.

Sin embargo, la playa virgen más espectacular de Mallorca es Trenc, un espacio totalmente natural de más de tres kilómetros a los cuales se llega atravesando las dunas que se encuentran salpicadas aquí y allá por la vegetación mediterránea. Su arena fina y blanca, uno de los mares más límpidos de la isla y su toque salvaje se han conjugado para convertirla en un verdadero paraíso nudista.

Las calas: Intimidad y encanto virgen

Tranquilidad y relax total en ambientes vírgenes con un toque exótico y salvaje, esta es la carta de presentación de las calas de Mallorca. Una de las más bellas sin lugar a dudas es Llombards,precisamente porque se encuentra de cara al islote Es Pontás, una meta reconocida internacionalmente no solo por su aspecto extraño que semeja un puente tendido hacia ninguna parte sino por presentar un verdadero desafío para los amantes de la escalada.

Otro sitio de fácil acceso que aún atesora las antiguas tradiciones de los pescadores es la cala S’Almunia. Aquí el viento ha sido un artífice caprichoso dándole formas inexplicables a las rocas para crear un ambiente casi mágico digno de ser visitado al menos una vez. Dentro de todas las calas de la isla, esta es una de las menos concurridas por lo que es ideal para el relax.

La naturaleza ha decidido cambiar su paleta de colores en la cala del Mago. Aquí el mar asume tonalidades esmeraldas y la arena es de un color dorado que se extiende por 30 metros escasos. El ambiente rústico del lugar esconde que a pocos metros se encuentran disponibles todos los servicios. Busca entre los muchos viajes baratos a Mallorca y encuentra tu viaje para poder disfrutar de la isla.