Comer Para Adelgazar

Comer para adelgazar hace que el aforismo que dice “verse bien es sentirse bien” sea posible en la vida y la salud de muchas personas en la sociedad moderna.

Uno de los problemas que más preocupan la supervivencia del hombre actual es la conservación de la salud y el mantenimiento de una figura estilizada, lo cual se puede lograr de una nueva y revolucionaria forma: comer para adelgazar.

Debido al frenético ritmo de la vida actual, las personas integrantes de la población activa a nivel laboral (18 a 65 años) en su mayoría, tienen desórdenes alimenticios, porque o bien no consumen suficientes alimentos sanos en proporción de nutrientes, de bajo contenido calórico y bajos en grasas saturadas, o consumen gran cantidad de “comida chatarra” entre comidas o para reemplazar una o varias de ellas, lo cual unido a una actividad sedentaria, consumo de alcohol, tabaquismo y alto nivel de estrés constituye una bomba de tiempo que puede explotar en cualquier momento generando patologías severas como enfermedades cardiovasculares terminales, diabetes, infartos, trombosis coronarias, gota ,etc.

Hay que partir de la base de que existen tres riquezas fundamentales par el ser humano y que no son negociables o no se pueden comprar con ninguna suma de dinero si se descuidan o se pierden. Y son: tiempo, salud y juventud.

De nada sirven el éxito personal, social o laboral cuando una de estas riquezas naturales y especialmente la salud fallan.

Sin salud no es posible gozar de la vida casi en ningún aspecto y todos la necesitamos como uno de los pilares básicos para cumplir y disfrutar las metas y los sueños que tenemos y cumplimos.

En este artículo nos ocuparemos de la salud, especialmente en solucionar una necesidad fundamental como es nutrirse adecuadamente pero conservando el peso corporal adecuado y luciendo una figura saludable y agradable en beneficio no sólo de verse bien y sentirse igual, sino de mantener el equilibrio orgánico necesario para vivir mejor y por más tiempo.

El sobrepeso constituye actualmente un dolor de cabeza tanto para hombres como para mujeres. No sólo desde el punto de vista orgánico por los problemas que conlleva y el acortamiento de la vida útil y física que puede producir, sino también desde el aspecto social, ya que una persona que pierde el control de su peso es segregada de muchos ambientes y oportunidades, y puede ser objeto incluso de bromas y burlas.

El problema de la obesidad es mucho más serio de lo que se piensa. En el mundo existen hoy día alrededor de 560´000.000 de personas con problemas de sobrepeso, lo que equivale a toda la población de los Estados Unidos sumada a la de tres o cuatro países de América Latina , y las cifras van en aumento , entre los que se incluyen población infantil y la mayoría de la población laboralmente activa entre los 20 y 60 años. Y esto traerá como consecuencias inmediatas, a mediano y largo plazo, la pérdida temprana de muchas vidas y enfermedades terminales con una vejez llena de limitaciones y dolores para otras.

En vista de que muchas personas son renuentes a la actividad física regular, que es la que mantiene el cuerpo en un correcto balance junto con una alimentación adecuada, hablaremos de un nuevo concepto: comer para adelgazar o comidas adelgazantes.

Básicamente esto consiste en utilizar comidas corrientes con un alto valor nutricional para perder o equilibrar el peso corporal, sin producir trastornos orgánicos como los generados por dietas que retiran alimentos y nutrientes importantes que el cuerpo necesita recibir con frecuencia y como resultado producen una baja en las defensas, descalcificación, pérdida de vitaminas, trastornos, convulsiones, etc.

Médicamente hablando se sabe que el cuerpo humano después de los 20 años pierde 1% de su masa corporal anualmente y lo convierte en grasa o tejido adiposo. Esto quiere decir que para los 60 años aproximadamente un individuo ha perdido la mitad de sus músculos y tiene la mitad de su peso convertido en grasa.

Por otro lado este tipo de grasa se acumula más en áreas localizadas tanto para hombres en la cara, cuello, tronco y parte superior abdominal, y para mujeres en la parte de las caderas, nalgas y glúteos y el abdomen inferior.

El problema principal de la acumulación de grasa es que es un tejido de reserva de energía, que el cuerpo acumula, pero no utiliza habitualmente y sólo lo hará en caso de necesitarlo, y si a esto le sumamos una mayor tasa de acumulación de grasa por la ingestión de comida chatarra de bajo valor nutricional y hábitos de vida sedentaria, las consecuencias orgánicas van desde el aumento de la presión sanguínea hasta las enfermedades terminales como cáncer, diabetes, hemorroides, problemas cardiacos, osteoartritis,etc ,lo que finalmente acortará la vida significativamente o la terminará definitivamente.

Ahora bien, muchas personas que consumen alimentos de bajo nivel nutricional o comida chatarra, hacen actividad física regular con el ánimo de seguir disfrutando de sus malos hábitos alimenticios, pero seguirse viendo físicamente bien.

Pero médicamente hablando no se pueden comer alimentos insanos o de bajo valor nutricional y que produzcan sobrepeso con el ánimo de perder estos kilos con sólo ejercicio, porque de nada sirve perder kilos con un cuerpo que no ha recibido los nutrientes adecuados y se ha desgastado internamente.

Para hablar entonces de comidas adelgazantes según estudios médicos comprobados se muestra que:

*Los alimentos de 0% grasa no funcionan.

No se puede bajar de peso mediante dietas bajas en grasa. Los alimentos de 0% grasa han sido populares durante más de 15 años, pero todavía nuestra sociedad sufre cada vez más de sobrepeso. Este hecho por sí solo debería demostrar que comer menús bajos en grasas no es la respuesta a la pérdida de peso.

*Las dietas bajas en calorías no funcionan.

No vas a adelgazar permanentemente mediante una dieta baja en calorías. De hecho, comer pocas calorías es lo peor que le puedes hacer a tu cuerpo, ya que se ralentizará el proceso de quemar grasas y te limitará las posibilidades de bajar de peso. (Las dietas bajas en calorías pueden lograr bajar unos gramos/libras de peso durante los primeros días, pero después la pérdida se detendrá, efecto conocido como ‘plato’ o ‘estancamiento’.

*Las dietas bajas en carbohidratos no funcionan.

Es muy difícil perder peso permanentemente con un plan de dieta baja en carbohidratos. Estos tipos de dietas se han hecho muy populares en los últimos años, pero el problema es que son demasiado estrictas y complicadas de seguir para la mayoría de las personas. Los menús bajos en carbohidratos tienden a robar a tu cuerpo demasiada energía (hidratos de carbono) y es casi imposible además de peligroso permanecer con el plan durante mucho tiempo.

Aprender a comer es la clave y solo se puede lograr cambiando algunos ingredientes de las recetas que consumes habitualmente, si lo haces como te indicaremos en nuestro recurso recomendado, entonces tu metabolismo quemará todas las calorías consumidas. Luego quemará la energía de reserva, el tejido graso o adiposo de tu cuerpo.

Te invitamos a profundizar y llevar a la práctica estos nuevos y revolucionarios conceptos “comer para adelgazar” en beneficio de una mejor salud y un cuerpo sano interiormente y renovado físicamente .

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