Consejos de divorcio para las mujeres

Cuando pases por un divorcio, no es el momento de ser pasivo o complaciente, ahora más que nunca una mujer tiene que ser fuerte y luchar por sus derechos. Tu marido se ha ido, pero tus hijos, tu casa y tus finanzas  pueden ser mantenidos  con buena salud si sigues estos sencillos pasos.

El primer paso en un divorcio debe ser conseguir un buen abogado. Estos se pueden encontrar preguntando a tus amigos, familiares o cuando buscas en Internet. Ten cuidado con los costosos anuncios a todo color en la guía telefónica o anuncios de televisión que son exhibidos en exceso, ya que frecuentemente no son los mejores.

Aunque los abogados son muy caros, necesitarás a alguien para que represente tus intereses, especialmente si tu ex marido tiene un abogado de divorcios que es experto.

No tener un abogado ahora puede significar perder tu casa o la custodia de tus hijos. Algunos jueces pueden ordenar a tu esposo que pague tus gastos legales si él era el principal ingreso del  matrimonio.

Muchas mujeres en el medio de un divorcio se sienten tentadas a mudarse de la casa de familiar a causa de los malos recuerdos y desacuerdos con su marido. Sin embargo, esto podría sentar un mal precedente. Si estás viviendo en tu casa cuando tu divorcio vaya a la corte, es mucho más probable que el juez te premie.

Lo mismo ocurre con la custodia y las visitas, el padre que tiene físicamente a los niños será la primera opción para la custodia permanente. Tu abogado te puede asesorar sobre cómo configurar el acuerdo para obtener el mejor resultado posible.

Una manera de asegurar un mejor resultado del divorcio es evitar los extremos emocionales. Ahora no es el momento de ser agresivo o de atacar a tu ex esposo, ya que esto puede resultar hostil para los mediadores y para el juez de lo familiar.

Tendrás que permanecer firme y reclamar tus derechos  sin ira y sin juzgar.  Habla con un amigo o incluso un con terapeuta para que te ayude a tomar decisiones y mantener la calma cuando más importa.

Tus hijos necesitan más cariño y tiempo de calidad, especialmente al principio del divorcio. Trata de estar con ellos tanto como sea posible y mantén la rutina diaria, la misma que antes del divorcio. Hay muchos buenos libros sobre el divorcio que pueden explicar la situación de manera objetiva al niño. Algunos pueden encontrarse en tu biblioteca.

Además, los niños pueden sentir que contribuyeron a tu divorcio por lo que tendrán que estar seguros de que esto no es verdad. Debes decirle a sus profesores, animadores  y otros adultos involucrados sobre el divorcio. Aunque esto puede ser embarazoso, tus hijos se merecen todo el apoyo emocional y la comprensión que puedas darles.

Quizá te resulte difícil, pero tienes que hacer todo para alentar a tu ex marido y a los niños a tener visitas regulares. Si puedes participar en los cumpleaños y fiestas por el momento, esto creará una sensación de normalidad. Nadie quiere hacer frente a su ex cónyuge y a sus hijos pero serás mucho más feliz si los ayudas a mantener  una sólida relación con su otro padre.

Por otro lado, si te niegas a dejar que tus hijos vean a su padre te verás mal ante los jueces y mediadores y puedes hacer que todo se ponga en tu contra en cuanto a los procedimientos de custodia del niño. Ahora es el momento de pensar de manera crítica y proactiva sobre tu situación financiera.

Cuando quieras abrir cuentas separadas conjuntas que hayas utilizado en tu matrimonio. Puedes utilizar éstas para salvaguardar el dinero para tus hijos y tu hogar.

El entrenamiento especial para las mujeres que son amas de casa está disponible en muchas áreas. Aunque puedes estar tentado a aceptar cualquier empleo que te pague cuentas, inversión en la universidad y/o formación profesional, el divorcio y el entrenamiento especial puede suponer una gran diferencia en tu éxito financiero a largo plazo.

No debes planear tener la misma situación financiera después de un divorcio como antes. Los ingresos de tu familia no pueden mantener dos casas de la misma manera que si fuera un apoyo único. El monto de la pensión alimenticia y de la manutención de los hijos quizá no sea lo suficiente, así que tendrás que empezar a vivir mesuradamente.

Aunque pueda que no haya una orden de manutención familiar, debes pedir a tu marido que aporte una cantidad mensual regular  para el mantenimiento de tus hijos hasta que el divorcio y la situación de custodia finalicen.

Debes ser lo más organizado posible durante el periodo de divorcio. No debes perder de vista la frecuencia con la que tú y tus hijos hablan con tu marido y  sobre lo que se dice.  Debes guardar todas las facturas, no importa lo insignificantes que parezcan.  Nunca saber qué aspecto de un divorcio puede ser objeto de controversia. Puedes hacer una gran diferencia. Las mujeres suelen tener problemas para encontrar apoyo y amigos que las apoyen durante un divorcio. Si los amigos y la familia ofrecen ayuda, tómalo con gratitud. Hay muchos grupos de apoyo y actividades sociales  para las familias monoparentales.

Las iglesias y otras organizaciones comunitarias pueden ofrecer programas especiales para quienes recientemente han pasado por un divorcio, ya que sus hijos se encuentran en una difícil situación. No tengas miedo de pedir ayuda y asistencia durante este tiempo difícil. Tomar estas medidas no hará que tu divorcio sea fácil o sin dolor. El divorcio es siempre un momento emocionalmente difícil.

Sin embargo, toma las decisiones correctas ahora pueden asegurar un mejor futuro para ti y para tus hijos. El proceso de divorcio determinará tu residencia, tus ingresos, la relación con tus hijos y tu futuro, así que aprovecha todos los recursos y el trabajo duro hacia el futuro como una feliz e independiente mujer soltera.