Consejos para la decoración del salón

El salón es, quizás, el ambiente más representativo de un hogar. Es al lugar adonde entrarán todas nuestras visitas, y lo que primero se verá de la casa. Por este motivo, la decoración del salón es un asunto de gran importancia, sobre todo si se está buscando una reestructuración o una remodelación total. El primer paso que debe debemos dar es estudiar las estructuras de la casa, sobre todo si se trata de la remodelación de una casa antigua. Quien aspire a lograr una decoración exitosa no debería luchar contra las estructuras del inmueble, sino integrarlas en forma armónica, aprovechando las y sacándoles el máximo partido. Esto es especialmente importante cuando se trata de salones grandes, que cumplen distintas funciones, o engloban diferentes ambientes en un solo salón. Por ejemplo, cuando el salón incluye el recibidor, el comedor, una biblioteca, y un espacio de trabajo con un escritorio.

Existen numerosas formas de separar los ambientes, otorgándoles la máxima funcionalidad, y, fundamentalmente, sin sacrificar luminosidad. Una idea es la colocación de muebles organizadores que separan los ambientes. Si no son demasiado altos, no más de 1 m 20 cm, la visual quedará despejada y el ambiente conservará su iluminación. Los paneles de vidrio conservan la luminosidad, a la vez que otorgan continuidad visual, incrementando la sensación de espacio. Instalar un montante de cristal sobre el marco de una puerta para la posibilidad de permitir el paso de luz, sin dar un efecto demasiado "pesado" sobre la decoración total puede ser una solución para integrar el espacio.

Las ventanas de techo también son una opción, cuando pueden ser colocadas, para otorgar luminosidad a esos rincones que han quedado demasiado oscuros, devolviéndole su funcionalidad y permitiendo su empleo sin recurrir a la luz artificial.

La distancia entre los muebles, y la disposición de los mismos de manera inteligente, también contribuye a delimitar los ambientes. Para tal fin, también es posible valerse de los desniveles propios del piso, y el revestimiento de los mismos que ayudará a marcar las zonas de forma visual. Los muebles mismos podrán marcar los límites de cada ambiente, creando una idea clara en quien contempla el salón de qué actividades se realizan en cada rincón. Para los espacios de trabajo, lo mejor es aprovechar al máximo las posibilidades de luz natural, y si es posible con una vista agradable. Esto ayudará a hacer más llevaderas las jornadas laborales. Siempre es necesario tener en mente que la decoración debe ser funcional, sirviendo, en último caso, a las necesidades de los habitantes.