Por qué muchos dicen que es difícil escribir. Si todos escribimos

“Vivir es producir significaciones”.

Sartre.

Dedicado a: Las palabras y a quienes tienen la capacidad de disfrutarlas.

El oficio de escritor jamás termina de perfeccionarse. Recurrimos a la palabra para expresar nuestras ideas y conectarnos con la comunicación imaginativa y real. Sin embargo, pocas personas toman plena conciencia de esa gran facultad que tenemos como seres humanos.

Es más, en la actualidad poco interesa recurrir al arte de la escritura. Incluso, pocos se preocupan por cultivar cualquier tipo de expresión escrita.

Llevo algún tiempo preocupado por la problemática que, al menos en mi localidad, se presenta por el acto de escritura. No sólo en lo que concierne al género literario sino a cualquier forma de expresión.

La problemática es igual de alarmante con el fenómeno del hábito de la lectura. Será que eso es porque lectura y escritura van de la mano? Sin duda un factor de lo que señalo es porque la educación poco está haciendo.

Llevo algún tiempo que estoy ofreciendo mis servicios de asesoría a estudiantes universitarios de mi localidad para la preparación de su tesis. Mis servicios son solicitados con la idea de que diseñemos una metodología de trabajo que nos permita lograr lo planteado en el proyecto de la tesis.

Y sin embargo, la mayoría de las veces invertimos más tiempo y energía intelectual y creativa al “proceso de escritura”.

Es verdad que muchos pasamos por el síndrome de “la página en blanco”. Nos quedamos paralizados, no sabemos qué escribir. La mayoría de las personas que asesoro me dan esa expresión: “no sé qué escribir”.

Paradójicamente argumentan que tienen muy claro sus ideas. ¿Por qué cuesta tanto trabajo “transmitir” con palabras escritas esas grandes ideas que los universitarios que ayudo tienen?

Las dos posibilidades que hipotéticamente manejo son: primero: que dichos estudiantes tienen poco vocabulario y por ello el margen de maniobra de la escritura lo van limitando. Segundo: precisamente por su poco lenguaje (que sería un corolario de la poca lectura), no tienen el hábito de la escritura.

Cuando me pongo a revisar los textos en borrador de las tesis, me doy cuenta que el sector educativo tiene que retomar en el proceso de enseñanza aprendizaje muchas herramientas que permitan no solo ejercitar el acto de escritura sino que se empiece a recuperar poco a poco el amor por la palabra. El amor por la vida. El significado de la vida es la palabra.

Autor: Abner Pantoja. Aprender a Escribir.