Bajo el efecto de la fiebre

                En el delirio de mi enfermedad  cuando la soledad me invadía por completo  de afectos con mis vínculos sanguíneos,  y los médicos y enfermeras eran mis únicas  compañía  la tristeza se apodero de mi persona por varias horas , las inyecciones , los dolores  de mi cuerpo ;eran insignificantes comp0aradas con las de mi alma .Aunque quería aparentar una cierta dureza , las lagrimas igual mojaron mis mejillas ,en realidad no sé por qué lastima  algo que siempre fue así , estuve la mayoría de mi vida sin el cariño de mis padres y hermanos debería estar acostumbrada. De pronto en mi soledad   se acerca una señora mayor ,para acomodarme la manta que me cubría , correrme los cabellos  de la cara  tomarme de la mano y preguntarme si estaba bien o si necesitaba alguna cosa, otra señora  un poco más joven, me ayudaba a vestirme y a ponerme los zapatos  mientras que otra me sostenía al caminar.

                               Todas estas demostraciones  de humanidad me hicieron comprender lo tonta que había sido una madre   para el momento y algunas hermanas aunque no lleven mi sangre. Que mas podría querer si ya tenía todo, siempre encontraremos    una madre cariñosa y unos hermanos atentos   que nos  acompañaran en los momentos difíciles, de nuestra vida, esto nos demuestra que el ser humano es la especie más  perfecta que pudo crear dios  que a pesar que existen algunos  con muy pocos sentimientos asía el otro, hay otras  que compensan esa falta de sentimientos.