Una mujer en peligro de muerte
Estaba saliendo de la Clínica Virgen del Pilar, eran ya las 2.30 de la tarde, terminaba una Histerectomía, mi asistente se fue en un taxi y el Anestesiólogo se había quedado platicando con un amigo en Sala, atravesaba la puerta de la calle y un Taxi a toda prisa se detuvo… ¡Miguel, Miguel…hermano una urgencia, una cesárea ahorita!-gritaba Daniel-¿De que se trata? -le pregunté-, la he tenido en su casa pero no nace está atracado en vagina, la cabeza está bien abajo-me dijo- ¡Es un Incompatibilidad feto/Pélvica- le dije- …debe estar con sufrimiento fetal- pensé- bueno arriba está Arturo…¿tu me ayudas o llamo a mi ayudante?- le pregunté-... ¡NO, No yo te ayudo!-me dijo y la subimos rápidamente fue anestesiada ya venía con suero y la lavamos, llegó Víctor el Pediatra y empezamos la Intervención, eran las 2,55 minutos de la tarde, el anestesiólogo, ducho en estos avatares, empujó la cabeza desde la vagina, para poder subir la misma yo la recibí arriba y así podía salir por la incisión de Monrro-Kerr y asi fue, el feto salió un poco deprimido, con liquido amniótico escaso, verde oscuro “Puré de arvejas” y con ligero mal olor…pero con buen Apagar. ¡Hay que ponerle antibióticos ¡-le dije a mi amigo-¡Ya, Ya…Si, Si, le pondremos!-dijo, estaba asustado- pero cuando intenté cerrar el útero el asustado…¡ fui yo!...,¡ todo el segmento estaba roto!, desgarrado, no se distinguían los bordes y la mujer sangraba y sangraba, mi amigo llamó por su móvil a un familiar diciéndole que traiga sangre que ya tenían disponible, felizmente llevaron dos unidades que Arturo le transfundió, inicialmente suturé a la ciega-no se distinguía nada- y con eso paré el sangrado un poco luego reconstruí, pero al intentar hacerlo no se podía porque un borde estaba perdido usé inicialmente dilatadores gruesos que Arturo introdujo por vagina…pero algo ayudaba pero era insuficiente y había empezado a sangrar así que le dije a Arturo que introduzca sus dedos hasta el segmento roto y empecé a ver sus dedos…¡ muévelos compadrito!-le decía - y así movimiento tras movimiento fui distinguiendo los bordes irregulares, delgados y sangrantes, los reforcé primero y luego los fui afrontando entre sí, creo que unas dos veces habré pinchado a mi compadre Arturo en esa faena, al final retiró sus dedos y el segmento fue reconstruido, mi asistente era Oncólogo, casi no entendía lo que había hecho, sólo expresaba su agradecimiento por tal faena, la paciente con dos unidades transfundidas, salió rosadita a su habitación, la familia estaba feliz, pues el RN estaba muy bien, estuvo cuatro días en la clínica con triple antibióticos, no se infectó, ni la herida, al bajar de Sala de Operaciones-quedaba en el 2º Piso- ya tenía consultas y ecografías esperándome pues ya atendía de 3 a 6 pm en dicho lugar… ese día almorcé a las 10 de la noche, después que terminé mi trabajo en mi querido y recordado Centro Ecográfico Natalie del Pilar del Jirón Gamarra de Trujillo.
Miguel Palacios Celi
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