Barcelona verde: Un recorrido por parques y jardines

Barcelona es una de esas ciudades que lo tiene todo: diversión urbana, una animada agenda cultural, playas con vistas espectaculares y espacios verdes a los cuales escapar cuando el ritmo cotidiano sea demasiado estresante. Además, su clima mediterráneo la convierten en un sitio perfecto para disfrutar de la naturaleza, ya sea a pie, en bicicleta o simplemente tendiéndose sobre sus prados verdes.

Parque de la Ciudadela

Durante varios años el Parque de la Ciudadela fue el único de la ciudad por lo que en la actualidad continúa siendo un referente emblemático dentro de todos los espacios naturales de Barcelona. Sus extensas zonas verdes están atravesadas por senderos serpenteantes con innumerables bancos que invitan a sentarse para disfrutar del panorama. Aquí y allá se erigen parterres solitarios que acrecientan el aire romántico del lugar.

No obstante, el verdadero emblema del parque es la Dama del Paraguas, una fuente monumental que en un tiempo incluso llegó a convertirse en uno de los símbolos de Barcelona. En franco contraste con sus formas delicadas, se erige la Fuente Wellington que representa el Nacimiento de Venus. Esta fuente es un verdadero despliegue de creatividad resultado de la mezcla de los estilos de los diferentes artistas catalanes del siglo XIX que participaron en su diseño, entre ellos el propio Gaudí cuando aún era muy joven.

Parque Güell

Dragones irisados y formas sinuosas que discurren entre la naturaleza fundiéndose en un abrazo perfecto; esta es la esencia del Parque Güell, uno de los legados más excelsos de Gaudí que aún hoy continúa atrayendo a miles de visitantes. Concebido como una verdadera ciudad jardín, lo primero que te sorprenderá es la enorme escalinata con su emblemática salamandra, un espacio lleno de símbolos y alegorías que solo el ojo atento y la mente despierta podrán descifrar.

Una vez dentro te asombrará la explosión de colores y luces que triunfa sobre un enrevesado entramado de formas en piedra que imitan lo mismo ríos de lava que árboles, estalactitas o figuras geométricas. No olvides alzar la vista cuando recorras la Sala de las Cien Columnas para que descubras gárgolas expectantes, leones y soles. Cuando desees tranquilidad te bastará apartarte un poco adentrándote en la vegetación de robles, algarrobos y pinos.

Jardines inolvidables

En la montaña de Montjuic se sitúa el Jardín de Mossèn Cinto Verdaguer, considerado como uno de los más bellos de Barcelona. Con excelentes vistas sobre la ciudad y el mar, será una delicia perderse entre sus principales protagonistas: tulipanes, jacintos y lirios de agua. Cada año se plantan sabiamente 80.000 bulbos que conforman una cinta ininterrumpida de colores delicados y aromas mixtos que se extienden a lo largo del sendero principal.

El panorama cambia radicalmente en los Jardines de Mossèn Costa i Llobera, cuya colección de plantas grasas es una de las más importantes del mundo. Aunque también podrás disfrutar de excelentes vistas sobre el mar, aquí no encontrarás plantas delicadas y coquetas pero de seguro te llevarás más de una sorpresa con la casi infinita variedad de cactus y plantas tropicales. Diferentes formas y tamaños estimulan la percepción durante todo el año pero si visitas este sitio durante la época de floración no podrás dar crédito al elegante colorido con el cual se revisten estas plantas.

Gracias al auge de las aerolíneas de bajo presupuesto, ahora escaparse a Barcelona es muy fácil. Consulta los sitios web de las principales agencias de viajes online para encontrar vuelos baratos a Barcelona y comienza a planificar un fin de semana relajante en esta fantástica ciudad.