Sé Feliz, sin imponerte obligaciones
Estamos tan acostumbrados a obedecer desde pequeños, que nos parece que solamente podemos funcionar si estamos cumpliendo órdenes. Nada más lejos de la verdad: el resultado será todo lo contrario a lo que deseamos obtener.
Estos días, he estado en cama con un tremendo resfriado y eso me ha permitido reflexionar sobre las obligaciones que nos auto-imponemos y me gustaría explicarte las repercusiones que tienen sobre nuestro cuerpo.
A veces pienso que mi cuerpo me detiene cada vez que he de hacer un giro importante en mi vida. Si no me doy permiso para hacer lo que me gusta, de la manera que a mí me gusta, el cuerpo reacciona y se enferma.
En el entrenamiento para ser feliz, no hay espacio para la imposición. Cada vez que te obligas, tu niña interior se rebela, distanciándote cada vez más de tus objetivos.
Lo único que conseguirás imponiéndote obligaciones, es alejarte cada vez más de la Felicidad, hasta que ya ni siquiera recuerdes que significa, ni donde puedes encontrarla.
Además si te obligas a ti misma, también obligarás a otros y sostendrás relaciones de esclavitud y no relaciones basadas en la verdadera libertad.
Ante cada nueva tarea que se te presenta, lo mejor es tomarte un momento para hacer una pequeña reflexión. Pregúntate:
¿Es importante para mí?
¿Puedo pasar sin hacerlo?
Busca entre las palabras que te dices diariamente y también en los pensamientos porque éstos son los que dirigen tus acciones, como si alguien te hablara en voz baja y escoge únicamente aquellas palabras y pensamientos que te den poder.
Te explico con un ejemplo, ante dos tareas a realizar, te dices:
“He de ordenar mi habitación”
“Tengo que organizar mis facturas”
Son el tipo de frases que suenan a imposición, y te convierten en una víctima ("¡pobrecita! tienes la obligación de hacerlo")… y además, te estás mandando, dándote órdenes a ti misma! ¡De solo pensarlo se me eriza la piel y me dan ganas de salir corriendo!
Mi recomendación es que pruebes con estas otras formas de decírtelo (u otras parecidas):
“Mi habitación necesita una limpieza y ahora es buen momento. En un ratito estará lista y ordenada y me sentiré genial! Manos a la obra!”
“Aquí están mis facturas del mes, pidiendo a gritos que las ordene y elijo hacerlo ahora mismo. ¡Qué bien me siento teniendo todos mis papeles en orden!”
Suena diferente ¿verdad? Son diferentes maneras de enfocar las mismas situaciones cotidianas.
Estas palabras te dan poder, porque describes los hechos, objetivamente, tú eliges tomar acción acerca de ellos y te imaginas lo bien que te sentirás después.
A partir de ahora, sabes que si te das órdenes No podrás Aprender a Ser Feliz. ¡La solución es hablarte a ti misma con cariño y actuar con decisión!
Si es importante para ti o no puedes pasar sin hacerlo… ¡tu elección no puede ser otra que ponerte a ello con la mayor Alegría y Dedicación!
¿Verás cómo sin imponerte nada, logras sentirte mucho más Feliz!
Maria Tolmo, La Coach de las Emociones: "Entrenate para Ser Feliz!" http://www.entrenateparaserfeliz.com/
Registro automático