Consejos para tu sesión de fotografía de embarazada

El embarazo es un momento muy bonito en la vida de toda mujer. Durante los 9 meses que dura sientes como crece tu hijo en tu interior, lo notas moverse, dar patadas… A pesar de ciertos inconvenientes, toda mujer que ha estado embarazada recuerda esa etapa con un especial cariño. Y la mejor opción para guardar dichos recuerdos para siempre es contar con un fotógrafo especializado en embarazadas.

Eso sí, a la hora de realizar una sesión fotográfica premamá, debes tener en cuenta los siguientes consejos:

Fecha

Cuando se realizan fotografías de embarazada, es importante que la tripa tenga un volumen óptimo, pues el fotógrafo va a centrar su trabajo en dicha zona del cuerpo. El mejor momento es a partir de los 6 meses de embarazo.  Eso sí, hay que tener en cuenta que en el último mes va a ser más difícil todo, puesto que en ese momento la embarazada está más cansada que nunca.

Ropa

En cuanto a la ropa que nos pondremos para acudir a la sesión de fotos, lo mejor es que sea lo más cómoda posible. Se puede optar también por ropa más sexy o atrevida para que el fotógrafo pueda realzar nuestras curvas.

Maquillaje y complementos

Lo que se busca en un reportaje fotográfico de embarazadas es, sobre todo, la naturalidad. La embarazada ha de mostrarse tal cual es, sin estridencias. No aporta mucho a las fotografías el llevar puestas pulseras u otros complementos que sean muy llamativos (a no ser que ese sea su estilo habitual). Y en cuanto al maquillaje, tampoco es recomendable salirse la línea habitual que lleve la embarazada en su día a día. Cuanto más natural, mejor.

¿Sola o en pareja?

En el  embarazo hay aspectos muy especiales que solo vive la madre, pero su pareja también es partícipe de esa etapa y posiblemente le gustará estar en la sesión de fotos. Aun así, siempre se puede optar por realizar la sesión de fotos individualmente y así tener un recuerdo de tu futuro bebé y tú.

Lugar

Habitualmente, el fotógrafo de embarazada nos dan la opción de realizar el reportaje en un lugar exterior, como por ejemplo una playa, un bosque, un jardín… un sitio que para nosotros sea especial y que nos haga sentir cómodos. Otra opción es hacer el reportaje fotográfico en nuestra propia casa, donde podremos estar mucho más cómodas y seguras. Además, esto añade la comodidad de no tenernos que trasladar a ningún lugar, teniendo en cuenta que estando embarazadas nos podemos sentir más cansadas o fatigadas. 

Y por último, lo más importante, para la sesión fotográfica no solo deberías buscar un fotógrafo experimentado, sino también una persona con la que te sientas cómoda, que sea cercano y sepa entender tus tiempos y necesidades.