Entrenamiento en suspensión y dieta equilibrada
¡Estás más gordo!
Este comentario es el comienzo de tus comeduras de cabeza. ¿Qué puedo hacer para adelgazar?,¿cómo consigo llevar una vida más sana?
El estilo de vida que llevamos, absorbidos por las prisas, el estrés y el sedentarismo, no ayudan a mantenernos físicamente en forma. Pues bien, si queremos no padecer, en un futuro no muy lejano, enfermedades cardiovasculares y todo tipo de problemas físicos, hay que plantearse mejorar nuestra forma de vida dia a dia.
Cuidar la alimentación es la primera regla que hay que seguir para empezar con el cambio. Eliminar la comida basura, incorporar más verduras y hortalizas, limitar la bollería industrial y comer variado es la base de una buena salud. Existen muchas dietas y soluciones "milagrosas" para perder peso o conseguir la eterna juventud, pero el sistema más fiable para estar sanos, como acabamos de decir, es la buena alimentación.
Hacer deporte, es el segundo secreto para lograr tu objetivo. Y tu dirás, pues ¡vaya secreto! Claro que esperabas, ¿qué te dijera que ibas a perder peso sentado en el sofát de tu casa viendo la televisión? Es muy duro al principio, pero también muy agradecido, te lo digo por experiencia. Sólo hay que adaptar el entrenamiento a tu forma física. No pretendas salir a correr 20 km el primer dia. Empieza con objetivos que sean posibles: trotar 10 minutos, caminar 5 y trotar otros 5 minutos más, jugar un partido de pádel o tenis con alguien de tu nivel, salir a dar una vuelta en bici de una hora, practicar con alguno de los aparatos de fitness que tienes por casa (la cinta de correr, la plataforma, la máquina de remo)...lo que quieras pero evita el sedentarismo y ¡empieza a moverte!
Mi consejo es que comiences realizando actividades aeróbicas como correr, nadar o montar en bici, para perder peso y posteriormente pases a fortalecer y ejercitar la musculatura.
Un deporte que se ha puesto muy de moda hoy en día es la práctica del TRX. Este aparato, te permite adecuar el entrenamiento a tu nivel, utilizando el peso de tu propio cuerpo para realizar los ejercicios. Te ayudará a mejorar la estabilidad, la flexibilidad e incrementar la fuerza. Combinado con el ejercicio aeróbico, lograrás avanzar rápidamente.
Si no tienes mucha fuerza de voluntad, utiliza la técnica de la cartera, que es la más efectiva porque es la que más duele. ¿Qué cuál es esa técnica? Apúntate a un gimnasio, o a la piscina o a clases de pádel o contrata un personal trainner, es decir, paga. Eso te va a obligar a que hagas algo porque no vas a estar pagando por nada ¿no?
Y esto nos lleva a la tercera regla de oro de la vida sana: ser constantes. Es fundamental para conseguir el objetivo que nos hemos planteado. No sirve de NADA hacer 3500km en bici en una semana, si durante los 6 meses siguientes no te vas a volver a mover de la silla, ó comer una tajadita de pescado con verduras hervidas durante un mes, si luego te vas a cansar y vas a estar otro mes entero comiendo pizzas y hamburguesas.
Recuerda que tu propósito no tiene que ser ir a la playa este verano y que todo el mundo vea el cuerpazo que tienes, debes de hacerlo por tu salud. El ejercicio moderado y constante, junto con una buena alimentación, conseguirán que te prevengas dolores musculares, de espalda, colesterol, cardiopatías y un largo etcétera de dolencias.
¡Así que ánimo y a empezar el cambio!
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