Ética empresarial

Hoy en día, encontramos un gran reto por parte de las empresas y organizaciones refiriéndose a la manera en que se presentan los objetivos y fines a socios y personal dentro de las mismas. La mayoría de las veces vemos en la misión y visión el alcance, en donde se incluyen a corto y largo plazo la búsqueda de los objetivos, y a su vez, el modo ético en los cuales se alcanzarán los resultados. Aunque esto  se transmita por escrito a través de grandes lonas o en credenciales del personal, no siempre quiere decir que se esté llevando a cabo y al contrario, pareciera que se va en contra de lo establecido, es por eso que debiera de haber un plan bien estructurado para no perder la esencia de los principios que se forjaron en los inicios de la organización.

Las organizaciones en la actualidad tienen un enfoque económico y pareciera que es lo único que buscan sin importar las repercusiones que pudiera haber al entorno que lo rodea, como tales están el medio ambiente y el personal implicado. Si solo existe y se aplica este enfoque lucrativo, se descuidarán  otros y se generará un desequilibrio que no traerá nada bueno a la sociedad en general, es por eso que se debe trabajar arduamente en ser una empresa de primer mundo en donde se cuiden y se aprovechen los recursos al máximo para asegurar la subsistencia en el mercado.

Para que una empresa sea ética tanto los fines como los medios deben ser propiamente éticos, ya que de nada sirve lograr un objetivo con malas prácticas en la consecución de él y viceversa. Entonces, todo lo que forma parte de la organización como los procesos, el personal, las prácticas y los fines debieran ser éticos para lograr que una empresa sea totalmente ética.

Una de las principales causas que originan que una empresa no sea del todo ética es debido a las personas que están posicionadas en los niveles más altos y que actúan como líderes directos de más líderes, propiciando una cadena en donde el mensaje que se transmite es de acuerdo a los principios éticos de esa persona en particular, es por eso que es importante que en los pilares de la organización se encuentren las personas mejores calificadas, con mejor criterio y conciencia de lo que pasa en su entorno y por supuesto, las más inteligentes y efectivas para tomar decisiones que llevarán a la empresa al éxito en el posicionamiento en el mercado.

Ser líder implica tener un gran poder, y un gran poder conlleva tener una gran responsabilidad en las decisiones que se toman en las acciones diarias de la empresa. Un gran líder logrará que los fines comunes para la organización sean los mejores y los más correctos para la sociedad, es por eso que él debe ser capaz y estar preparado para cualquier situación que incluya un factor ético en ella. También, aparte de sus actitudes, aptitudes y habilidades debe desarrollar ciertas virtudes como la honestidad, la responsabilidad, la perseverancia, la justicia, la prudencia y la fortaleza que hablarán por el mismo y lo determinarán como persona.

La ética empresarial será dada y enriquecida gracias a los líderes que la desarrollen día a día, por eso la importancia del liderazgo desarrollador en las organizaciones para una mejora continua y que no tenga fin.