Diferencias entre las pelucas de pelo natural y sintéticas

Algunas personas, especialmente mueres, recurren a pelucas para disimular la pérdida del cabello o para tapar su calvicie durante etapas de quimioterapia (en el caso de pacientes oncológicos). A la hora de escoger una peluca debemos plantearnos si necesitamos una de pelo natural o nos sirve una sintética. Estas últimas suelen ser más baratas (dependiendo del modelo) pero ofrecen menos mobilidad.

Las pelucas de pelo natural permiten una gran movilidad y la posibilidad de realizar todo tipo de peinados como si se tratase de tu propio pelo, dando además un aspecto muy real, de forma que nadie pueda saber que se trata de una peluca siempre y cuando esté bien colocada y se cuide correctamente. También hay que aclarar que su diración es mayor si se siguen las instrucciones de mantenimiento; no obstante presentan una serie de desventajas que debemos considerar y tener en cuenta:

• El precio suele ser mucho más elevado que el de una sintética, aproximadamente 4 veces más cara, aunque depende del modelo en concreto.
• El mantenimiento suele ser más complejo al tratarse de un producto más delicado, de lo contrario presentará un aspecto muy desagradable.
• Hay que tomar muchas precauciones, especialmente evitando el contacto con el agua, ya que en ese caso tendríamos que secarla cuidadosamente con el secador lo antes posible. También les afecta la humedad.
• Pesan más que una artificial y pueden llegar a ser menos soportables.
• Deben peinarse con mucho cuidado o delicadeza o los pelos comenzarár a romperse poco a poco, del mismo modo que si aplicamos habitualmente productos capilares.
• Los cuidados requieren mucho tiempo.

Por su parte, las pelucas sintéticas suelen ser más baratas, aunque hay varios tipos de modelos, cada uno fabricado con unos materiales y cada uno requiere un cuidado diferente. Los precios son bastante más bajos que las pelucas de pelo natural en general, por eso es la solución que adopta mucha gente que no puede permitirse una de pelo real. Por suerte hoy en día se ha avanzado mucho en este campo y ya es posible encontrar pelucas sintéticas con un cabello mucho más moldeable que las de hace unos años, pero aún así presentan una serie de inconvenientes:

• Los secadores pueden estropear el pelo y oscurecerlo con el paso del tiempo. Si se va a usar la peluca durante mucho tiempo es aconsejable que el pelo sea de color castaño o negro.
• Al contrario que las de pelo natural, las sintéticas no pueden volver a teñirse.
• No parecen tan reales y las que lo parecen suben de precio de forma considerable.
• Son poco moldeables y es muy difícil hacer un peinado que resista 24 horas. Normalmente habrá que conformarse con el diseño de fábrica y como mucho se podrá hacer algo simple como una coleta.
• Se estropean mucho antes y por tanto su duración es menor.

Cada persona debe ver todas las opciones y seleccionar aquella que más le convenza, aunque siempre es recomendable consultarlo con los especialistas de un centro capilar, ya que una peluca que te guste puede no ser la más adecuada para ti según la forma de tu cabeza.

Valora detenidamente las ventajas y desventajas de cada tipo de peluca y elige aquella que te haga sentirte bien.