Un Sacerdote en Trasplante Hepático
Descansaba después del almuerzo y de las visitas matutinas
De repente, aparece la Enfermera Roxana y me dice “Dr.…. Ya llegó el Sacerdote”
Pero….Pero yo no he llamado a ningún Cura, debe ser para otro paciente- le dije-,
NO- me contestó- es para Ud.
Yo ya he recibido Santos Oleos hasta en 3 oportunidades en mi tragedia anterior-insistí-
¡Ah no sé doctor!- dijo- y… abrió la puerta para que entre el Cura
¡Hola Miguelito!- me dijo el Cura-
¡Hola Padre José Antonio!, era mi buen amigo, que iba a visitarme y no a darme el último sacramento… ¡Uf que alivio!
Nos abrazamos…con un largo abrazo y nos saludamos y hablamos sobre la enfermedad, sobre lo que había pasado, sobre las Oraciones en Trujillo, sobre tantas cosas…
-Luego me quedó mirando y dijo ¿Cuál ha sido el momento más dramático Miguel?
Bueno- le contesté- han sido tres Hitos en esta Historia, el PRIMERO fue cuando me enteré que tenía Cirrosis, no lo podía asimilar, no lo creía, era un imposible, lo negué muchos días, tuve que reconfirmarlo, el SEGUNDO fue cuando me dicen, 3 meses después, que además tenía Cáncer y que para salvar mi Vida de una muerte próxima requería de un Trasplante de Hígado, era imposible asimilar esta realidad, creo que conocí la locura en estos días y el TERCERO fue cuando desperté de la Operación, y descubrí mis apósitos, la larga incisión, los drenes, los catéteres y exclamé ¡ me han trasplantado!, ¡estoy salvado,!, ¡Gracias Dios Mío!¡Que emoción!, inigualable...
-Dime Miguelito y… ¿que pensaste sobre las causas de esta desgracia?
Como es Natural, buscaba culpables, pensé en varios médicos, blasfemé también pensando que Dios es malo, que no le bastaba mi tragedia anterior o que estaba pagando algún pecado, alguna falta… ¡No sé!... ¡estaba confundido!, ¡Aturdido!, de la noche a la mañana tenía Cirrosis y a los 3 meses ¡Ya tenía Cáncer! Y en unos meses moriría…
-¿Tenías Dolores Físicos, Sangrados, hinchazón?... ¿Que te dolía?
Bueno, tenía en realidad dos clases de Sufrimientos UNO el Biológico, había cansancio, falta de apetito, estreñimiento, adelgazamiento, dolor abdominal, fiebres altas y DOS había también sufrimiento Moral, sentía frustración, pena, remordimientos, tristeza, miedo, angustia…
-Y… ¿como los enfrentabas?
Los Médicos me daban Dieta, Medicamentos, Régimen de Vida y con eso sorteaba las molestias biológicas o Físicas, pero el Sufrimiento Moral lo enfrentaba Rezando, quería paz, sosiego, resignación…
-entiendo entonces Que te rendías ante la enfermedad… ¿Es así Miguelito?
NO José Antonio, no me rendí jamás, ofrecía mi sufrimiento como una purificación, como un Capital de Gracias, este dolor físico y Moral es largo, es como atravesar un Desierto caluroso, seco y abrazador, pero al final llegas a la Tierra Prometida…
-Claro...Pero dime ¿No despotricabas de Dios?
Realmente que NO, yo había leído a Goethe que una vez escribió que “Los goces y el sufrimiento instruyen al Hombre sobre si mismos”, sabía que Meister Eckhart había dicho que el “Señor llama a las Almas Nobles a un desierto y ahí les habla a sus Corazones”,yo sabía que el Sufrimiento genera Virtudes, sabía esto desde mi gran sufrimiento anterior en el accidente, sabía que esas virtudes eran Paciencia, Fortaleza interior y arrepentimiento y eso trataba de madurar, es difícil, se estrellaban a cada rato con esa Combi llena de angustias, miedo, pena, frustración…pero intentaba.
-dime Miguelito el momento mas emocionante… ¿cual es?
El más dramático es cuando el Jefe me comunica “Te tocó Palacios”, es decir cuando me comunica que me operarían…es intenso, desbordante, te enmudece, te hipnotiza, a mí me dejó Mudo, estático…y el mas emocionante cuando abrí los ojos en la UCI y descubro que estaba ya operado… ¿entiendes José Antonio?, disculpa estoy llorando…es que…
-No, No,…tranquilo Miguelito, entiendo la emoción-dijo el Cura-
Al descubrir mis apósitos, supe que estaba operado y quería gritar y gritaba, dando Vivas a Dios, a los Médicos…las Enfermeras me miraban sorprendidas, era mi “Tierra Prometida” padre, era mi salvación, mi segundo Renacer, mi tercer nacimiento…
-Si Miguelito entiendo, me alegra…por ahí dicen que eres muy valiente… ¿es así?
No para nada, es un piropo generoso desde el punto de vista humano, los trazos de Valentía y Coraje eran Morales, estaban en la fortaleza interna, yo no rechazaba el dolor, lo asumía, lo aceptaba, es inevitable, es una realidad, tienes que convivir con ese sufrimiento, yo sé por mi formación Cristiana, que Dios permite el dolor y el sufrimiento respetando nuestra libertad, las causas de mi tragedia eran Errores y Horrores humanos, no eran castigo divino, ni pago de algún pecado, yo confiaba, tenía FE- es cierto que flaqueaba-al final usaba el dolor para meditar sobre mi existencia, maduraba y fortalecía mi crecimiento ético y espiritual, claro que lloraba, confieso que sufrimos mucho, no sólo yo, sino toda la familia, que quería “Tirar la Toalla”, incluso ya trabajaba al 50% de lo que normalmente trabajaba, me deprimía, gritaba, pero ese Instinto de lo sagrado me tranquilizaba, fue una lucha larga, dura,… Dios ¿existes? Osaba preguntarle, ¿Dónde esta Dios?, exclamaba a menudo, No es fácil padre…pero tal ves por ahí había algo de Valentía….
-¿Cómo así Miguelito?
Es una Valentía y un gran Coraje, el aceptar el sufrimiento y no rechazarlo,
Es Valentía reconocer que el drama es por tu culpa, en mi caso el no darme cuenta que estaba enfermo, pues habiendo recibido Transfusiones en 1989, había el peligro de estar infectado por el Virus de la Hepatitis C…como que así fue, finalmente.
Es Valentía usar este largo Martirio, Calvario y Congoja, para meditar, para tu auto Reflexión y hasta para Convertirte…
Es valentía pasar meses y años, sufriendo en Lista de Espera, donde cada vez que sonaba el teléfono, se desarmaban los Tejidos Biológicos y Espirituales…
Es fácil hablar, escribir, aconsejar…pero ¡anda Vívelo y acepta todo esto!, es muy difícil y para hacerlo requieres Fortaleza interna, coraje, que sólo te lo da la FE…
-Creo que la Enfermera quiere hablarnos-me dijo José Antonio-
Si, Padre, es hora de mis Medicamentos
-Bueno Miguelito, Oremos una decena, descansa y regresa a la Sociedad, con esa FE.
Gracias José Antonio, Recemos…Rezamos y se marchó
Miguel Palacios Celi
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