La bendición de una familia en unidad
Madre Teresa de Calcuta: ¿Qué puedes hacer para promover la paz mundial? Ve a casa y ama a tu familia.-
El hombre, la familia y la nación tienen un origen común en la mente y en el corazón de Dios y por eso son instituciones que debemos defender, cuidar y promover.
Pueden decirse tantas cosas sobre la maldad del hombre, su pecado y sus faltas, pero el hombre es una criatura por Dios y por eso se mantiene firme la esperanza de una nueva oportunidad para él. Dios estableció un plan de salvación para el hombre, basado en su infinito amor y llegó al supremo acto de misericordia de dar la vida de su Hijo unigénito para que todo aque qne en él crea no se pierda más tenga vida eterna.
Así mismo las naciones han tenido circunstancias adversas y momentos de fallas colectivas delante de Dios. Pero la nación fue establecida por Dios y habrá una nueva oportunidad para que retornen al origen y glorifiquen al Señor y encuentren una nueva oportunidad delante de Él. Una hermosa promesa para el pueblo está contenida en 2ª. De Crónicas 7:14 : “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su ierra"
La familia fue creada por Dios desde el principio de los días y Él se encargará de salvaguardarla, pero es necesario que sus miembros, es decir, esposos e hijos tengan los brazos abiertos y el corazón dispuesto para recibir la bendición que Dios quiere darles, por eso es conveniente darle campo al Espíritu Santo en cualquier momento para que venga y nos ministre.
Un mensaje necesario para las familias de la tierra sería, “Familia muévete hacia adelante y recupera lo que te pertenece porque el Señor te lo ha dado”.
La vida en familia le agrada a Dios y hace parte de su plan perfecto. Por eso el enemigo odia la unidad familiar y quiere destruirla a toda costa. Hay que decirlo sin rodeos: el enemigo no está interesado en que haya unidad familiar y por eso trata de destruirla mediante toda clase de engaños. Hoy somos poderosos y nuestro poder radica en la familia que Dios nos ha dado.
Es necesario por eso, mejorar el diálogo en familia e invitar a Jesucristo para que haga parte fundamental de ella y que haya corazones abiertos al amor y, ade más del amor, al afecto a la cercanía y a la amistad.
¿Amistad en la familia? Por supuesto que sí. Estos son los días de las distancias y las barreras, por eso no es suficiente el amor, sino también la cercanía que sólo produce una buena amistad
¿Amistad entre quiénes?
- Amistad de los padres hacia los hijos
- De los hijos hacia los padres
- Del esposo hacia la esposa
- De la esposa hacia el esposo
Sería maravilloso que hoy mismo, el padre llame a su hijo y le diga algo así como:
-“Hijo, he estado leyendo la Biblia y tengo una palabra de parte de Dios para ti”
En este caso el padre ejercerá su sacerdocio y hablará no solo de lo que él siente y piensa, sino de los que piensa y siente Dios sobre determinado tema relacionado con la unidad familiar.
Dios desea que haya amistad y santidad en nuestras vidas, nuestros hogares y nuestros hijos.
Por eso es necesario reconocer y recuperar nuestro destino personal y reconocer que nuestra identidad, la verdadera identidad del creyente, está sólo en su firme relación con el Creador.
Jesús es un constructor de puentes y el más bello y fuerte de todos los que hizo fue aquel por medio del cual los hombres se acercan a Dios y Dios se acerca a los hombres.
Que ese mismo Jesús sea el puente para mantener siempre unida a tu familia.

Lo bueno que vaya a hacer hoy, hágalo bien, por usted, por su familia y por su país. ¿Ya leíste Maicao al Día?





































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