El método bumping, un peligro muy real
Durante años, el método bumping ha sido empleado por profesionales del mundo de la cerrajería con el fin de llevar a cabo la apertura de todo tipo de puertas cuando se produce la pérdida o el olvido de las llaves por parte del cliente. Sin embargo, no tuvo que pasar mucho tiempo para que ladrones y delincuentes vieran en este método una vía rápida y sencilla con la que cometer sus robos y allanamientos.
Se trata de un método muy fácil de ejecutar y para el que solamente hacen falta una llave debidamente manipulada y un objeto contundente con el que poder golpearla, siendo suficiente para ello un martillo o incluso un destornillador. A día de hoy, se calcula que aproximadamente el 90% de las cerraduras que se pueden encontrar en el mercado son susceptibles de ser abiertas con el método bumping. El peligro, como pueden ver, es totalmente real.
Es el momento, por tanto, de analizar en detalle este problema y buscar soluciones efectivas que garanticen la seguridad de nuestros hogares y comercios.
¿Cómo funciona, en realidad, el método bumping?
En esencia, el método bumping o ramping, consiste en la apertura de los cilindros de una manera rápida, limpia y sin rotura del mecanismo de la puerta mediante la percusión de sus pitones usando para ello una llave previamente manipulada conocida como llave bump. Tras introducir la llave y efectuar el golpe, los pitones se desplazarán de manera simultánea liberando de esta manera la línea de corte cuya función es impedir que la cerradura gire ante una llave que no es la suya. La línea de corte queda liberada muy poco tiempo, apenas unos segundos, pero es más que suficiente para que un ladrón con experiencia tenga vía libre para llevar a cabo sus propósitos.
Como hemos dicho, para proceder a la apertura de cualquier puerta mediante el método bumping sólo son necesarias una llave bump y un destornillador.
Es una técnica sencilla de emular, rápida -un cerrajero con experiencia apenas tarda más de 30 segundos en efectuarla- y no deja rastro alguno en la cerradura. Cabe enfatizar este último detalle ya que se trataría de un robo sin pruebas evidentes en la cerradura, por lo que algunos países de Europa se han visto en problemas cuando han descubierto que algunas de sus aseguradoras no daban cobertura a las viviendas allanadas y desvalijadas a través de este método, alegando una falta de rotura de los elementos de acceso. Prácticamente aludiendo a un robo ficticio por parte del asegurado, lo que ha costado más de un disgusto.
¿Qué puedo hacer para garantizar la seguridad de mi hogar?
Hemos conocido el método, conozcamos ahora las soluciones que a día de hoy podemos encontrar en el mercado. Como ya hemos adelantado, más del 90% de las cerraduras son vulnerables a este mecanismo de apertura. Por suerte, existe ese otro 10% que cada vez ve cómo aumenta su proporción de cerraduras a prueba de bumping. Se denominan sencillamente cerraduras antibumping. Y es que determinadas casas de fabricación de cerraduras, conscientes de este peligro lamentablemente en auge, han comprendido la necesidad de hacer algo al respecto y diseñar cerraduras de alta seguridad que incorporen medidas de protección contra este tipo de ataques. Suelen ser cerraduras con unos precios ligeramente por encima de lo que costaría una cerradura normal. Pero, sin duda, ese pequeño sobrecoste bien merece la pena si con ello logramos salvaguardar la integridad de nuestros hogares y de quienes viven en ellos. Del mismo modo, existen también cerraduras de seguridad antibumping especialmente diseñadas para todo tipo de comercios y vehículos.
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