Toyota,¿acaso un gigante que no se ha preparado para los nuevos desafíos?
No hace mucho tiempo atrás que un vehículo de marca Toyota era reconocido por su calidad en todos los aspectos, pero, ¿qué ha pasado en los últimos tiempos?
Los fabricantes coreanos siguen creciendo, Kía sigue produciendo autos cada vez más eficientes, Hyundai de la misma manera (pertenecen al mismo grupo automotriz). Kía ha llegado a varios lugares con su modelo eléctrico, el Soul, cuyos acabados desde mi perspectiva, son tan bien estilizados y perfeccionados que es una muy buena opción, el Kía Niro, competencia directa del Toyota Prius, el Hyundai Ioniq, otro rival directo para el Toyota Prius.
Pero, ¿ acaso será posible que el mundo se estanque con la tecnología híbrida? De ninguna manera, por los problemas ambientales cada vez los fabricantes automotrices buscan nuevas alternativas, y para más exactitud los vehículos eléctricos son la primera opción. Muchas concesionarios asiáticas han empezado a incursionar en este nuevo desafío, y surge así la marca BYD (Build your dreams) con una propuesta arrasadora, la implementación de buses eléctricos, con sus respectivos puntos de carga, y no sólo eso, ya se ha visto varios de sus modelos eléctricos.
Sin embargo el gigante nipón, Toyota, se ha empecinado en la tecnología híbrida, claro está con mucho éxito, aunque en Ecuador, mi país de origen, las baterías de los vehículos híbridos no duran como deberían hacerlo, estamos hablando de un promedio de 60 000 km de uso para que presenten la temida avería, no obstante, esto no ha sido ningún impedimento para la venta de estos vehículos, siempre y cuando las garantías cubran ese alto rubro que representa un cambio de estas baterías.
Toyota también ha hecho un intento por mostrarse más amigable con el ecosistema buscando como otra alternativa los vehículos cuya alimentación sea el hidrógeno, he ahí el Toyota Mirai, sin embargo esta solución no ha tenido el éxito deseado y la balanza se sigue inclinando hacia la energía eléctrica.
Se han escuchado de acuerdos entre Toyota y Tesla (el gigante norteamericano líder en vehículos eléctricos), pero esto no pasa de rumores. ¿Será que la hegemonía de Toyota en lo que respecta a cuidado ambiental se está terminando para dar paso así a los fabricantes chinos que no han perdido un sólo minuto en la investigación y desarrollo de vehículos eléctricos?
Esperemos que Toyota despierte de su letargo y se abra a la búsqueda y desarrollo de la tecnología futurista: los vehículos propulsados por electricidad.
En este mundo tecnológico y audaz, un fabricante no se puede dormir, caso contrario vendrá otro y otro y ganarán terreno.
Lo bueno de Toyota su indiscutible calidad mecánica, lo malo, su poca apertura al desafío del mundo actual.
CARH
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