Qué es la Equinácea y que puede hacer por ti

Originaría de América del Norte, la equinácea es una planta de tallo delgado y hueco que puede alcanzar hasta un metro ochenta de altura. Entre junio y agosto, crecen de él flores violetas o púrpuras y era utilizada por los indígenas americanos como planta medicinal. 

En la actualidad se han encontrado más de 20 especies de equinácea, sin embargo, solo 10 de ellas han sido verificadas para el consumo humano. Los indios americanos utilizaban la planta para bajar la fiebre, enfermedades venéreas, heridas, incluso para mordidas de serpiente, pero no fue hasta comienzos del siglo XX que distintos alemanes comprobaron cuales eran sus verdaderos beneficios para nuestra salud. 

Aunque la composición de la equinácea es sumamente compleja, se ha descubierto que la planta contiene vitaminas B Y C, minerales como el magnesio, hierro, calcio y sodio, fibra, betacaroteno y otros compuestos que ayudan a potenciar y reforzar el sistema inmunitario. Sin embargo, también es utilizada para tratar diversas enfermedades como:

Aunque a simple vista ambas enfermedades son muy parecidas, se pueden diferenciar por la intensidad de los síntomas. El resfriado común provoca congestión nasal, tos, dolor de garganta y cabeza, mucosidad y perdida de apetito principalmente. En algunos casos produce fiebre, pero leve y dura muy poco tiempo, en cambio la gripe puede extenderse y sus síntomas aumentan con el tiempo, incluso ocasionando otros síntomas como fiebre moderada o alta, dolores musculares, fatiga y escalofríos. 

Para ambos casos, la equinácea se convertirá en el mejor aliado porque su función principal es potenciar las defensas inmunológicas y también es inflamatorio que se traduce en la disminución de los síntomas al combatir las diversas bacterias alojadas en tu cuerpo. Especialmente es utilizada para controlar la fiebre, eliminar la mucosidad y la tos, mejorando en poco tiempo tu estado de salud. 

La equinácea contiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que al utilizarse como tópico es muy efectivo para tratar problemas de la piel como el acné leve. Igualmente, la planta es un excelente regenerador de la piel al fomentar la aparición de nuevas células epiteliales, conocidas por ser las células que conforman la piel. Su uso frecuente aporta una apariencia saludable y refrescante, convirtiéndose en un excelente tratamiento para restaurar la apariencia de la piel en personas mayores. 

La equinácea es de gran ayuda para combatir infecciones porque promueve la producción de interferón, responsable de la producción de glóbulos rojos, ayudando así a neutralizar los virus, además de controlar las células Natural Killer, NK, responsables de la destrucción de las células infectadas y las células cancerosas. 

La equinácea ha sido recomendada para el tratamiento de múltiples enfermedades infecciosas como son: 

• Infecciones vaginales

• Herpes 

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• Infecciones urinarias como la uretritis o cistitis

• Orzuelos 

• Infecciones del oído 

• Debilidad corporal como es el síndrome de la fatiga crónica 

• Infecci ones en las vías respiratorias 

La falta de apetito puede surgir por múltiples factores que ocasionan principalmente la deshidratación y adelgazamiento. Si últimamente estas teniendo muchos problemas al comer o no te sientes motivado, la equinácea pueda ayudarte porque estimula el apetito además de incentivar la secreción salivar que disminuye los problemas de boca seca, causante de algunas enfermedades digestivas como la dificultad para realizar correctamente la deglución que consiste en el proceso de ingestión que permite trasladar el alimento desde la boca hasta el esófago.

La equinácea se recomienda especialmente para personas adultas y en adolescentes mayores a los 12 años. Según el Comité Europeo de Hierbas Medicinales, niños menores a los 12 años han presentado reacciones desfavorables como como urticaria, inflamaciones y erupciones en la piel. En el peor de los casos, los niños pueden desarrollar una reacción inmunitaria llamada anafilaxia que puede provocar desmayos, presión arterial baja, pulso débil o acelerado y dificultad para respirar. 

Al mismo tiempo, no es recomendado consumir equinácea si la persona padece de enfermedades en el hígado, está embarazada o se encuentra en lactancia. Antes de incorporarla dentro de tu rutina, es importante consultar a tu médico, así podrá indicarte la dosis más adecuada para ti y por cuanto tiempo deberías tomarlo. 

La equinácea es una planta que podrá aliviarte múltiples enfermedades de forma natural. Podrás adquirirla en diferentes presentaciones como en cápsulas, tinturas, extracto seco y fluido e infusión. En el caso de tomarla en infusiones, no es recomendada consumirla más de 2 meses   porque pudiera disminuir su efectividad. En Oro Verde queremos escucharte, por eso te preguntamos ¿Cuáles beneficios piensas sacarle a la equinácea? y ¿Qué otras plantas deseas conocer? Déjanos tu comentario, estamos muy interesados en ayudarte.